SANTIAGO.- Pese a controlar el duelo, los locales de Tigres UANL no lograron ponerse en ventaja en la final de la Copa Libertadores, ante River Plate y firmaron un empate sin goles en el primer duelo que define al campeón del certamen.
El primer tiempo fue trabado. Escasas llegadas de peligro en las áreas, donde el elenco local marcó una mayor presencia en el arco rival, aunque con poca claridad.
De hecho, recién a los 18 minutos se produjo la llegada más clara del partido, la cual ni siquiera fue un remate directo al árco. Tras un centro de Egidio Arévalo Ríos, la bola dio en el argentino Leonel Vangioni y, tras el desvío, se estrelló en el travesaño del meta Marcelo Barovero.
Los aztecas dominaban en el centro del terreno, con un duelo friccionado, mientras que los rioplatenses aprovechaban para salir de contragolpe, intentando generar peligro. Sin embargo, la poca efectividad de los delanteros en ambas escuadras quedó plasmada en el 0-0 del marcador, cuando el juez anunció el medio tiempo.
Al inicio del complemento, River Plate mostró otra actitud. Los dirigidos por Marcelo Gallardo exhibieron más intensidad en sus jugadas, acercándose al arco defendido por el meta Nahuel Guzmán.
Sin embargo, el envión de los argentinos se vio eclipsado por el orden que mostró el elenco mexicano en el fondo. De a poco, las llegadas de River Plate fueron disminuyendo y el juego se fue estancando en el medio.
Tigres buscaba salir en bloque desde su línea defensiva, pero la poca efectividad de sus defensas y volantes cortaba las jugadas en mitad de terreno.
Y los norteamericanos se acercaban de a poco. La pelota detenida fue su principal arma para generar peligro en la portería "bandasangre". De hecho, el capitán de los aztecas, Juninho, exigió la estirada del meta Barovero con un potente tiro libre, pero seguía faltando la precisión para abrir la cuenta.
Y a cinco minutos del final, el mexicano Jürgen Damm tuvo la más clara para poner a su escuadra en ventaja. El volante recibió un excelente pase en profundidad por parte de Jesús Dueñas, avanzó, eludió al meta Marcelo Barovero, pero quedó incómodo para rematar. Cuando cedió atrás para buscar a un compañero, la defensa argentina ya se había armado, evitando la conquista.
Los minutos finales no fueron muy diferentes. Tigre se acercaba con poca presición al arco de River, mientras que los argentinos intentaban aguantar y salir de contra. No obstante, el marcador no se movió y el marcador quedó firmado con el 0-0.
Con el empate, las escuadras deberán definir al campeón de la Copa Libertadores el próximo 5 de agosto, cuando se enfrenten en el estadio Monumental de River Plate en el duelo de vuelta por el máximo cetro de América a nivel de clubes.