AMSTERDAM.- La imagen de Robin van Persie mordiendo su camiseta con la derrota ante Turquía consumada es un símbolo de la incredulidad que vive el fútbol holandés: la "oranje" ya sufre por su posible eliminación de la Eurocopa de Francia 2016.
"Que verguenza", título el diario "De Telegraaf". "La Orange es el chiste de Europa", añadió el periódico, con lo que deja el claro el sentimiento que generó la actuación de la selección.
La derrota en casa por 1-0 ante Islandia el jueves y la caída por 3-0 ante Turquía el domingo relegaron a Holanda a la cuarta ubicación del Grupo A, dos puntos por detrás de los turcos, con dos partidos por jugar.
Con Islandia y la República Checa ya garantizadas para las dos plazas directas, los holandeses sólo pueden aspirar a desplazar a Turquía del tercer puesto y acceder a un repechaje.
En la última doble jornada, Holanda será visitante de Kazajstán y recibirá a la República Checa, mientras que Turquía visitará a los checos y jugará en casa ante Islandia.
La última vez que Holanda faltó a una Eurocopa fue en 1984, también en Francia, mientras que el último gran acontencimiento que no tomó parte fue en el Mundial 2002.
Nadie podía imaginarse este presente hace 12 meses, cuando arrancaron las eliminatorias y los naranjas llegaban como terceros en el Mundial Brasil 2014, después de haber sido subcampeones en 2010.
Además, con la ampliación de cupos para el certamen en Francia, las eliminatorias parecían más sencillas que nunca.
Por eso, no resulta extraño que el país futbolístico haya amanecido hoy en estado de shock después de las dos derrotas, que sepultaron las esperanzas de revertir la mala campaña con la llegada del nuevo entrenador Danny Blind.
"La caída en picada del equipo holandés, tercero en la última Copa del Mundo, es probable que termine en el fondo del fútbol europeo", publicó el periódico "De Volkskrant" en su página web.
"La oranje se ha convertido en un equipo aburrido, repulsivo con un entrenador que, de acuerdo con una parte de la opinión pública, se enfrenta a salir de su cargo después de haber ingresado por la puerta trasera", añadió.
Estaba previsto que el ex internacional Blind asumiera el timón que iba a dejar Guus Hiddink el próximo año, pero la renuncia del anterior seleccionador lo obligó a hacerse cargo del equipo antes de lo previsto.
Blind reorganizó el equipo, nominando como nuevo capitán al veterano Arjen Robben, pero el extremo del Bayern Múnich salió lesionado en la ingle en lo que marcó el principio del fin.
El domingo, fue el hijo entrenador, Daley Blind, uno de los responsables de la derrota, cuando cometió un error que ayudó a Turquía a anotar el segundo gol. "Estoy decepcionado y enojado, sobre todo conmigo mismo. Siento que tengo que culparme, especialmente para el segundo gol", afirmó el jugador del Manchester United a la emisora ¿¿NOS.
También el mediocampista Wesley Sneijder se mostró con una dura autocrítica ante NOS: "Tal vez es mala suerte, tal vez la falta de confianza, pero permitimos dos goles fáciles. Esto tiene que ver por completo con una falta de concentración y claridad".
El entrenador Blind, por su parte, lamentó los "errores personales" y la falta de acierto frente al arco rival. "Tuvimos más ocasiones que Turquía pero no convertimos", dijo el ex defensor del Ajax, que insistió en que la eliminatoria aún no está definida.
Y en el mismo sentido se manifestó su hijo Daley: "Tenemos la esperanza de que será muy difícil, pero en el fútbol puede pasar cualquier cosa".