Novak Djokovic se coronó campeón en el Abierto de Estados Unidos.
AFP
SANTIAGO.- Novak Djokovic sigue demostrando por qué es el número uno del mundo. El serbio se impuso a un encumbrado Roger Federer, quien amagó una remontada en los juegos finales pero no logró hacerle frente al sólido juego de Nole.
El actual monarca en Estados Unidos completó una gran temporada, donde llegó a la final de los cuatro majors y se impuso en tres de ellos: El Abierto de Australia, Wimbledon y ahora el Abierto de Estados Unidos.
Pero el duelo tuvo un accidentado comienzo y su inicio tardó tres horas más de lo esperado debido a las lluvias que cayeron en el sector.
Pero, tras cuatro mangas, en tres horas y 20 minutos de juego, el ahora dos veces campeón del Abierto de Estados Unidos se impuso al suizo por parciales de 6-4, 5-7, 6-4 y 6-4 para quedarse con la final del último Grand Slam del año.
El inicio del encuentro fue parejo y muy reñido. Pero el punto de inflexión llegó en el tercer set -cuando había ganado uno cada uno-. EL marcador estaba igualado 4-4 y el suizo no supo aprovechar las dos posibilidades de quiebre que tuvo.
El set, y finalmente el match, se quedaron en manos de Djokovic, quien aprovechó las dudas en el juego del suizo.
Así, el serbio logra su segundo US Open (el último fue en 2011, cuando superó a Rafael Nadal), siendo su tercer Grand Slam de la temporada y el décimo de su carrera, demostrando por qué es el mejor tenista en la actualidad.
