Cristián Larraín
SANTIAGO.- Una tarde de récords se vivió hoy en el Club de Golf Los Leones. El campeón, Wilson Bateman, y sus acompañantes en el podio rompieron la marca impuesta en el Abierto de Chile por el nacional Felipe Aguilar en 2008.
El canadiense, quien se impuso en el certamen, terminó la competencia con un registro de 24 golpes bajo el par, en un circuito de 72 hoyos. En tanto, Rafael Campos y Bryan Martin, segundo y tercero respectivamente, finalizaron la competición con marcas de -23 y -22. Todos ellos con un registro sobre el -20 que registró el valor nacional hace ya siete años.
El oriundo de Canadá, quien se llevó la corona en el Abierto de Chile, mostró su alegría por el título obtenido durante la tarde de este domingo. "Creo que es el sentimiento más feliz que he tenido en mi vida, todavía estoy emocionado. Es increíble, no tengo como explicar esta sensación. El último putt era de alrededor de un pie, pero estaba temblando porque Bryan y Rafa jugaron muy bien. Fue una disputa muy emocionante y honestamente creo que mi juego mental fue clave", confesó el flamante campeón de la competencia.
En tanto, el chileno Guillermo Pereira fue el mejor exponente nacional en la competición. El golfista, que hace casi un mes comenzó en el profesionalismo, destacó en su primer torneo del PGA Tour Latinoamérica, ubicándose en el cuarto lugar con un score de 18 golpes bajo el par.
"Esto es un logro grande para mí. Quedé muy contento con la actuación. En la última ronda venía a disfrutar. Tenía una estrategia bastante clara de jugar simple, partí muy bien y luego el doble bogey del 5 me complicó. Igual estoy satisfecho por lo que hice, aunque quería ganar el campeonato. Nunca tuve miedo de los competidores, sé que estoy a buen nivel y que podría haber ganado", dijo un confiado Pereira.
Además, la sobresaliente actuación que exhibió el chileno le permitirá competir en el Mundo Maya Open, torneo que se disputará en México dentro de dos semanas.