SANTIAGO.- Contraste total. Mientras por un lado en España llenan de elogios a Claudio Bravo por su gran actuación en la obtención del Mundial de Clubes, por otra critican el "feo gesto" que tuvo el alemán Marc André Ter Stegen.
Y claro, porque la gran duda antes del partido era cuál de estos dos goleros iba a jugar ante River Plate. Luis Enrique volvió a darle la confianza al chileno, quien cumplió de muy buena forma.
"River buscó el gol para maquillar el resultado con ganas, pero entonces se encontró con un espectacular Claudio Bravo que justificó una vez más su titularidad", señala Sport.
El mismo medio agrega que "si el FC Barcelona se ha marchado del Mundial de Clubes con su portería a cero ha sido, en gran parte, gracias a las intervenciones de Bravo, que ha hecho lo más difícil para un portero: estar perfecto en los pocos balones que tocó".
Mientras que para Mundo Deportivo, lo de Bravo fue "impecable. Su titularidad fue lo más debatido de los prolegómenos de la final, ya que las quinielas ponían a Ter Stegen. A la postre, el chileno jugó este Mundial íntegramente parando muy bien pese a lo poco que le chutaron, sobre todo una a Gonzalo Martínez. Tras la Copa América, merecía un título internacional con el Barça ya que la Champions, para la UEFA, no le contabiliza. Menudos organismos".
Pero también hubo espacio para criticar la reacción del alemán Ter Stegen, quien no ocultó su molestia al ser relegado a la banca. Tanto así que sólo le dio un frío abrazo al chileno y después no apareció en las fotografías de las celebraciones.
"El alemán incluso dejó un feo detalle. Con 0-3 en el marcador, el River estuvo a punto de marcar en dos ocasiones pero Bravo realizó dos intervenciones fantásticas que provocaron que todo el banquillo del Barça se levantara para aplaudir la acción del chileno. Todos menos uno. Ter Stegen se quedó inmóvil sin celebrar las paradas de Bravo. Tampoco se movió ni un pelo el alemán cuando Luis Suárez marcó sus dos goles. Ter Stegen no estaba para fiestas y demostró el tremendo enfado que le provocó la suplencia", apuntó Don Balón.
Y en Alemania también dieron cuenta de lo mal que se sintió el golero teutón. "Un pequeño perdedor entre los vencedores fue Marc-André ter Stegen. El portero alemán tuvo que ver el triunfo desde la banca. Luis Enrique dio preferencia Claudio Bravo", señaló Sueddeutsche.
Al mismo tiempo que Kicker destacó que "Marc-André ter Stegen, sin embargo, estaba feliz sólo como espectador: El arquero se sentó al igual que lo hizo en el partido de semifinales en el banco, Claudio Bravo se interpuso entre la preferencia de los puestos".
Ter Stegen no celebra
Frío saludo