SANTIAGO.- Jorge Sampaoli quiere dejar la selección chilena y aunque todo indica que su exitoso proceso está cerca de llegar a su fin, cumplir su deseo no le será tan fácil.
"Jorge tiene un contrato vigente y se debe cumplir". Precisamente, ese vínculo es lo único que frena al entrenador para tomar hoy sus maletas y dejar para siempre Juan Pinto Durán.
Es que el presidente de la ANFP, Arturo Salah, fue tajante: Si el técnico se quiere ir debe pagar. La dirigencia no está dispuesta a ceder.
Pero el casildense sabe que partir hoy es algo muy complicado si no llega acuerdo ¿Por qué? Por la sencilla razón que en caso de renunciar en este momento tendría que cancelar 6.3 millones de dólares.
La cifra es alta, muy alta, y equivale a los sueldos negociados entre enero de 2016 y diciembre de 2018.
Sampaoli y su abogado parecen tener claro que la vía judicial, esto es, renunciar sin pagar la cláusula apelando a la violación de la confidencialidad de su contrato, no tiene suficiente piso.
El DT sabe que cancelar esa millonaria cláusula hoy es algo imposible, por eso a lo largo de la reuniones que tuvo con Salah le pidió irse sin pagar. El técnico intentó buscar un acuerdo, pero la respuesta de la ANFP fue un rotundo no: "Hay un contrato que respetar".
Y ese contrato dice que el adiestrador argentino aún tiene 3 años por cumplir al mando de la "Roja", en el que pactó para 2016 un salario de US$ 1,8 millones, que sube a US$ 2,2 millones en 2017 y a US$ 2,4 millones en 2018.
A día de hoy, el futuro es incierto, todo se ve complicado. Si bien Sampaoli sigue siendo el entrenador de la selección, "a la fuerza", su deseo de partir es claro.