Suárez marcó el último gol.
AFP
SANTIAGO.- El duelo de chilenos no tuvo sorpresas. Claudio Bravo celebró e Igor Lichnovsky sufrió en el triunfo de 3-1 del Barcelona sobre el Sporting de Gijón.
Fue un amargo debut para el defensa chileno, quien en el encuentro pendiente de la fecha 16 se estrenó con una derrota en la Liga española.
Pero mientras el zaguero se retiró de la cancha con la amargura de perder, su compatriota una vez más festejó de la mano de un Barcelona que sigue dando pasos hacia el título.
Es que con el triunfo de este miércoles en calidad de visitante, Bravo y compañía aumentaron su distancia en la cima sacándole 6 puntos al Atlético de Madrid y 7 al Real Madrid.
Los goles del triunfo del Barcelona fueron obra de Lionel Messi en dos ocasiones (24' y 30') y Luis Suárez (67'), mientras que el descuento del Sporting lo anotó Carlos Castro (27').
En el encuentro, Bravo tuvo muy poco trabajo. Las llegadas rivales fueron escasas y cuando se le necesitó, respondió sin problemas.
En tanto, para Lichnovsky sí hubo más trabajo. El defensa mostró un regular cometido durante los 90 minutos sufriendo con la velocidad del tridente Messi-Suárez-Neymar.
Es más, en el segundo gol del Barcelona el defensa chileno no apuró en la marca al uruguayo, quien finalmente cedió para que el argentino anotara.
Además, Lichnovsky fue protagonista de una particular jugada. Producto de sus ganas de llegar a todos los balones, en el minuto 18
le propinó una patada en la cabeza a un compañero.