BARCELONA.- Exactamente a las 16:00 horas en Chile, 20:00 en Barcelona, el plantel titular del Arsenal saltó al campo de juego del Camp Nou a realizar los trabajos precompetitivos, en la previa del duelo ante el Barcelona por la vuelta de los octavos de final de la Champions League.
Bajo una intensa lluvia, los cerca de 45 mil hinchas catalanes que había en ese momento en el recinto deportivo pifiaron ensordecedoramente al equipo del técnico francés Arsene Wenger.
Y en los once estelares de los "Gunners" se encontraba el atacante chileno Alexis Sánchez, quien regresaba al estadio culé luego de su último partido con la camiseta blaugrana, el pasado 17 de mayo de 2014.
Si bien en los días previos al duelo la prensa local especuló bastante con el recibimiento que tendría el seleccionado nacional por parte los forofos del Barça, faltando 18 minutos para el arranque de las acciones todo quedó claro: Alexis tuvo una tibia recepción de la parcialidad local.
Al ser nombrado por los altoparlantes cuando se daba a conocer el equipo visitante ni aplausos, ni pifias se escucharon para el tocopillano.
En tanto, el reencuentro con algunos de sus ex compañeros tampoco tuvo mayor calidez. Con Dani Alves y Lionel Messi sólo un apretón de mano. Sin embargo, con Neymar se saludaron con un fuerte abrazo.
Ya en el partido, cuando Alexis tocó por primera vez el balón el público no tuvo ningún tipo de reacción, aunque esto cambiaría a los 21 minutos del lance.
El tocopillano realizó una notable acción que inició en la mitad del campo. Se fue en demanda hacia el pórtico de Ter Stegen, eludió a tres jugadores, tocó para un compañero, pero éste fue controlado por la zaga catalana. Tras esto, la hinchada local aplaudió la acción de buen fútbol protagonizada por el nacional.
En la segunda etapa todo continuó igual. No había ningún tipo de manifestación de apoyo para Sánchez, salvo a los 79’ cuando su fulminante derechazo, desde un tiro libre, fue controlado con un gran manotazo del golero alemán. En ese momento, el nacional volvió a ser alabado.
Minuto 93 y pitazo final en el Camp Nou. Sánchez saludó a un par de jugadores de su escuadra y tras esto se despidió de cada uno de sus ex compañeros. Ahora, claramente, tanto Messi como Dani Alves abrazaron al atacante de los "Gunners".
Así terminaba una jornada tibia entre Alexis y su ex hinchada, esa que en algún momento celebró sus 47 goles con la camiseta culé, pero que hoy busca encontrar su mejor forma futbolística en Londres.