La desafiante acción del delantero.
El Mercurio
SANTIAGO.- Las heridas de la Copa América que Chile le ganó a Argentina parece que aún siguen abiertas en los trasandinos. Así al menos quedó demostrado luego de la celebración de Ángel Di María, que significó el empate parcial 1-1 en el estadio Nacional.
A los 19' minutos, el atacante logró la igualdad con un buen remate cruzado entre la defensa, silenciando a los hinchas que aún sonreían por la apertura de la cuenta de Felipe Gutiérrez en el minuto 11.
Luego de su tradicional festejo formando un corazón con las manos, el delantero del Paris Saint Germain se llevó su dedo índice a la boca en un gesto de silencio para los fanáticos chilenos.
El puntero se tomó revancha de lo que pasó en la final del torneo continental que ganó la "Roja", duelo donde debió abandonar tempranamente luego de lesionarse a los 29' y tener que ser reemplazado por Ezequiel Lavezzi.
El desenlace del partido coronaría a Chile campeón de América por primera vez y dejaría a los trasandinos con un amargo sabor de boca por su segunda final consecutiva perdida, tras caer ante Alemania en Brasil 2014.