Un golazo de cabeza de Azmun a falta de un cuarto de hora para
el final del partido garantizó al equipo del sur de Rusia el segundo
puesto y una histórica plaza en la máxima competición continental.
El Zenit de Hulk, y que estaría tras los pasos de Manuel Pellegrini, no pasó el domingo del empate ante el
Lokomotiv Moscú, por lo que lo máximo a lo que puede aspirar el equipo
hoy de André Villas-Boas es al tercer lugar, un pobre consuelo para el
equipo patrocinado por Gazprom.
Esta temporada el Zenit logró clasificarse por segunda vez en
su historia para los octavos de final de la "Champions", donde fue de
nuevo eliminado por el bestia negra, el Benfica.
El Rostov, que está dirigido por Kurbán Berdíev y comandado
por el central español César Navas -ambos campeones de liga con el
Rubín-, aún mantiene intactas sus esperanzas de lograr el título.
El CSKA, con el que se alternó en el primer puesto durante las
últimas semanas, le aventaja sólo en dos puntos tras derrotar hoy el
Krasnodar (2-0).