El ex Juventus sumó 12 coronas en su carrera en el duelo que significó el adiós de Josep Guardiola.
AFP
SANITAGO.- Con la Bundesiga ya en el bolsillo, iba en busca del doblete en su primera temporada en el Bayern Munich. Este sábado y siendo clave en la definición a penales, el volante chileno Arturo Vidal conquistó la Copa de Alemania luego de que su equipo derrotara al Borussia Dortmund en la final del torneo.
Jugando los 120 minutos que duraron el período reglamentario y la prórroga, el seleccionado chileno fue una de las figuras en el partido que marcó también la despedida del entrenador Josep Guardiola del elenco germano.
Vidal brilló desde los 12 pasos al marcar con fuerza la primera ejecución de los rojos, pese a que el portero Roman Burki le adivinó el lado.
El Bayern terminó conquistando la gloria en una serie que terminó 4-3 en favor de ellos, luego de batallar en un cerrado encuentro ante un Dortmund que también hizo méritos para levantar la copa.
Y es que durante los 120 minutos, ambos cuadros tuvieron varias ocasiones para marcar, sin embargo, la impericia de sus atacantes impidió que hubieran goles durante ese período.
Robert Lewandowski y Pierre Aubameyang no tuvieron una buena tarde en el Olímpico de Berlín. Eso sumado a que también ambos arqueros estuvieron certeros a la hora de evitar la caída de sus respectivas vallas.
Neuer fue la razón para que el Borussia no se pusiera en ventaja en el primer lapso. Los dirigidos por Guardiola se vieron sobrepasados por los amarillos en esa fracción, con un Vidal que se echó el equipo al hombro en los momentos más débiles de su escuadra.
En el complemento, la balanza se equiparó, pero el tanteador no se movió. Fue así como se forzó la prórroga, donde tampoco hubo espacio para las diferencias.
Todo quedó reservado para la emoción de los penales, donde el Bayern demostró que no sólo hay que tener suerte, sino que también clase para ejecutar desde el fatídico punto.
De esta forma, Vidal sumó su segundo título con los bávaros y la duodécima copa de su carrera profesional, que a estas alturas, parece más que consagrada en el Viejo Continente...