SANTA CLARA (EE.UU.).- La derrota que sufrió la selección chilena de fútbol en su debut en la Copa América Centenario ante Argentina, tuvo una serie de hechos antes, durante y después del duelo disputado en Levi's Stadium de Santa Clara, Estados Unidos.
Esto es lo que no se vio del mal arranque de la "Roja" en el certamen continental, un arranque que dejó muchas dudas de cara al duelo del viernes frente a Bolivia en Boston.
"Tomy", el mejor antiexplosivo
Seguridad a prueba de todo. La organización de la Copa América Centenario no dejó nada al azar. Uno de los aspectos que más llamó la atención en el Levi’s Stadium fue el riguroso trabajo de la policía estadounidense para evitar cualquier hecho delictual.
Y para ello "Tomy", un perro de raza Golden, cumplió un arduo trabajo revisando todos los autos que ingresaban al sector de Tribuna Preferencial. Con su poderoso olfato buscaba si en algún lugar había un artefacto explosivo. Además, todas las personas eran controladas con una máquina antimetales por personal especializado.
Llegó el "Papa Francisco"
Un fanático hincha de la "Albiceleste" no encontró mejor cosa que llegar al estadio disfrazado del Papa Francisco.
Néstor Rizzo, de 57 años, tiene como cábala imitar al Pontífice. "Desde que me visto como el Papa Argentina no ha perdido". Claramente a Rizzo le llegó la ayuda divina desde Roma.
Nadie se quedó sin entrada
Faltando tres horas para el inicio del encuentro entre la "Roja" y la "Albiceleste" muchos hinchas llegaron a buscar sus entradas que habían adquirido con anterioridad, pero también hubo varios que compraron un boleto en el estadio.
A los forofos poco les importó los altos valores de los tickets, lo que iban desde los US$ 100 y hasta los US$ 350. "Todo por ver al actual campeón de la Copa América", decía un fanático oriundo de Talca.
Igual falló el himno nacional
Para evitar el bochorno que sufrió la selección uruguaya de fútbol, a la que la organización le colocó el himno de Chile antes del duelo frente a México, dos horas antes del arranque de la brega se escuchó tres veces la canción nacional en el moderno estadio.
Pero así y todo igual falló la planificación. Ocurre que el himno chileno fue cortado en la mitad, aunque eso no fue impedimento para que la hinchada criolla de igual forma lo entonara hasta el final, lo que también realizaron los jugadores.
"Pura buena onda con los hermanos argentinos"
Muchos hinchas se juntaron en el frontis principal del estadio a la espera que abrieran las puertas para el ingreso. Pese a que en el lugar se encontraron forofos de ambos países, no hubo ningún hecho que lamentar, ni menos reportes de algún detenido.
"La verdad que hay pura buena onda con los hermanos argentinos. Nos hemos sacado fotos y también muchas bromas, pero todo con respeto", señalaba Carlos Contreras, comerciante chileno que vive hace más de 20 años en San José.
La "Marea Albiceleste" superó a la "Roja"
No hay duda. En el Levi’s Stadium los argentinos fueron más que los chilenos. Según la organización, al recinto llegaron más de 30 mil hinchas trasandinos y cerca de cinco mil compatriotas.
Claramente, en San José la "Marea Albiceleste" superó a la "Roja".
"¡Messi, Messi, Messi…!"
A los 8 minutos del compromiso los miles de forofos argentinos comenzaron a pedir a la gran figura del seleccionado trasandino, el delantero Lionel Messi.
A los 31’ y 64’ no se cansaron de gritar a viva voz "¡Messi, Messi, Messi…!". Finalmente, el técnico Gerardo Martino prefirió no arriesgar al jugador del Barcelona y lo dejó en la banca de suplentes.
Los reclamos de Pizzi
A diferencia de otros partidos, el técnico de la selección chilena de fútbol, Juan Antonio Pizzi, estuvo bastante molesto con los cobros del árbitro del cotejo, el uruguayo Daniel Fedorzuck.
En reiterados momentos "Macanudo" reclamó contra el juez de la brega y a ratos las emprendió contra Gonzalo Jara y Arturo Vidal. Otro que no se salvó de la molestia del entrenador fue el cuarto árbitro del partido, a quien muchas veces le refutó el trabajo del charrúa.
El enojo de Eduardo Vargas
A los 69 minutos del partido el atacante Eduardo Vargas fue reemplazado por Mauricio Pinilla. El nacido en renca no tuvo un buen cometido y Pizzi entendió que era mejor sacarlo del encuentro.
Al momento de abandonar el campo no saludo al técnico y para peor tiro lejos una botella de agua isotónica. Claramente Vargas no quedó para nada feliz con el cambio.
