SANTIAGO.- Bastante molesto se mostró el técnico de la selección brasileña, Dunga, luego de la eliminación de su equipo tras perder por 1-0 ante Perú en la Copa América Centenario, con un gol con la mano del delantero Raúl Ruidíaz.
"Todos vieron lo que sucedió, no podemos modificar lo que todo el mundo vio. En este momento nuestro trabajo está en la basura", señaló de entrada y sin ocultar su frustración el entrenador.
"No comprendo por qué estuvieron 4 minutos hablando los árbitros y el asistente y después no resolvieron nada. Brasil no fue eliminado jugando al fútbol", sentenció.
Sin embargo, el juego de su elenco nunca gustó en un cien por ciento entre los hinchas de su país, por lo que los cuestionamientos sobre el DT serán mucho más fuertes luego de su histórica eliminación.
"Sólo le tengo miedo a la muerte, no a perder mi puesto de trabajo como entrenador. Es un proceso de transición y hay que tener paciencia. El brasileño se acostumbró a ganar y quiere soluciones de un minuto a otro", dijo al respecto.
Ahora, el próximo desafío del técnico será en los Juegos Olímpicos que se desarrollarán en Río de Janeiro, donde la presión por salir campeón será aún mayor.
"Sin dudas, la medalla va a ser una presión, Brasil nunca la ganó", cerró el entrenador de la "Verdeamarelha".
