Lampe lamentándose ante Chile en la Copa Centenario.
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SANTIAGO.- Hoy todo Chile celebra el título de la Copa Centenario que le permitió además consagrarse como bicampeón de América. Pero a la hora de recordar los momentos claves del certamen disputado en Estados Unidos, hay una jugada que quizás pudo cambiar la suerte de la "Roja".
Fue el polémico penal que le dio el triunfo a los nacionales por 2-1 sobre Bolivia en el segundo lance de la fase grupal. Y los altiplánicos aún no lo olvidan.
"Hicimos un gran partido y sólo lo perdimos por el árbitro (el norteamericano Jair Marrufo). Fue toda una historia ese cobro que nos dejó sin nada", se lamenta un mes después en conversación con Emol el portero Carlos Lampe, titular en ese cotejo.
Para el golero, quien se convirtió en la nueva contratación de Huachipato, "claramente pesó que Chile era el campeón defensor. Mi compañero (Luis Gutiérrez) no abre el brazo en ningún momento, le pega en el hombro. Para mí no era penal. Nos sentimos perjudicados porque decide el partido".
Lampe revela que antes del partido había estudiado cómo pateaba los penales Vidal. "Pensé que podía atajarlo. Él patea más veces al lado donde yo me tiré, sabía que era él el que lanzaba y decidí momentos antes. Me cambió el lugar y anotó".
Pero el enojo de todos los bolivianos comenzó antes de ese cobro. "Cuando se cumplió el tiemplo reglamentario el árbitro nos avisa a todos que dará seis minutos de agregado. Nadie puede decir lo contrario, lo escuché yo, Vidal, Gary Medel, Alexis Sánchez. Nadie entendió cuando el cuarto juez levantó el cartel con 8 minutos. Ahí obviamente que todos nosotros alegamos, ya nos querían perjudicar. pero bueno, sabemos que siempre saldremos para atrás en cobros contra Chile, Argentina o Brasil".
Ya con el paso del tiempo, Lampe cree que a Chile le sirvió mucho el ganarle así a Bolivia. No sólo por el resultado.
"Estaban desesperados por ganar. No arrancaron bien, pero el partido contra nosotros fue un jalón de oreja. Se dieron cuenta que si no se enchufaban cualquier selección les podría ganar, se pusieron las pilas. Porque si empatábamos, Panamá iba a tener chances en el último partido. Incluso los panameños con un empate ante Chile clasificaban", considera el golero.
Finalmente, y ya analizando su presente y futuro en Huachipato, el meta boliviano señala que se vino al fútbol local por el "prestigio que puedo ganar en Chile. Futbolísticamente están bien y hoy todos están mirándolos porque son los bicampeones de América. No sólo tienen jugadores en Europa. Para mí es un plus estar acá pensando en mi selección. Incluso tenía una propuesta en Irán que era económicamente mejor pero perjudicaba mi carrera, allá no te ven mucho".