No claudican.
Archivo El Mercurio
SANTIAGO.- Sigue la amenaza de paro. El Sindicato de Futbolistas Profesionales, Sifup, se mantiene firme en su postura de no arrancar el Torneo de Apertura 2016-2017 por su descontento con la ANFP por determinar solo un descenso a la B y ninguno a Segunda.
Este lunes se reunirán los jugadores de Primera y de la B en la sede del organismo para discutir los pasos a seguir. Y el presidente del ente, Carlos Soto, no cree que haya variación en la decisión de no presentarse.
"La reunión debería ser corta. Solo Audax Italiano está en contra del paro. Copiapó no puede venir, pero mandó una carta donde nos apoya. Santiago Morning y la UC juegan mañana (hoy), pero mandarán a alguien. Con la UC hablé hace 10 días y piensan en el bien colectivo... Hay un tema importante... Se dijo 'vamos a estar por un año más con este formato y el próximo una comisión determinará cómo serán los próximos torneos'. ¿Seguimos improvisando? Un jugador de la U preguntó: '¿Quién nos asegura que el próximo año vamos a jugar de febrero a diciembre, porque el otro calendario nos complica'?", criticó en conversación con El Mercurio.
Soto reconoce que esto "es un recurso extremo, pero esta situación viene desde enero. Lo planteamos, tuvimos una asamblea, en marzo nos reunimos con la ANFP. Y cuando llega el momento de la verdad, no se consideró lo que pedimos. El paro es un tema de fondo, porque tiene que ver en cómo les afecta a los jugadores un sistema de campeonato... Es una competencia sin competencia. Los dirigentes actúan como una colusión: se ponen de acuerdo, dicen 'no hay descenso', y se aprueba. Una colusión".
De paso, el ex jugador considera que "para mí, los clubes le quitaron el piso a (Arturo) Salah. Votaron por ellos, los aplaudieron, pero llegado el momento de fijar un sistema de campeonato no apoyaron. Se va a producir una cesantía nunca antes vista en Chile. El fútbol chileno va a retroceder 13 años, a lo que pasaba entre 2003 y 2005, cuando no había descenso. Cuando aparentemente se estabilizó todo, pero tuvimos cero competencia y el torneo se fue abajo. ¿Sabe algo más? Hay clubes que obligaron a sus jugadores a firmar que tenían que jugar igual. Y ahí el asunto se pone pesadísimo. Pasó en Rangers, la semana pasada. Es grave, grave, porque no hay voluntad de arreglar el asunto".