El ex U. de Concepción se vistió de héroe sobre el final.
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SANTIAGO.- La importancia de las pelotas detenidas y de nunca dar por finalizado el cotejo hasta el pitazo final del árbitro. Con esa consigna, O'Higgins arrancó con el pie derecho en el Apertura luego de vencer estrechamente a San Luis por 1-0.
La agónica conquista de Pedro Muñoz a los 91 minutos, le dio los tres puntos al elenco de Rancagua en el compromiso que marcó el inicio del Torneo de Apertura 2016-2017.
Eso y poco más se vio en un partido muy flojo, en el que ambas escuadras se neutralizaron mucho y sintieron el rigor de las pretemporadas.
Y es que a ambos pusieron ganas, pero sobre el sintético del Lucio Fariña de Quillota se vio poco fútbol. En el primer tiempo, ambos se repartieron el dominio, pero carecieron de profundidad y centraron la disputa en la zona media.
Aquella tónica se repetió en el complemento, lapso en que ninguno supo sacarse ventajas. Parecía que el 0-0 no se rompía, hasta que en el primero de los cuatro minutos adicionados por el juez Cristián Andaur, vino un tiro libre que terminó siendo clave.
Ejecutó desde unos 35 metros Gonzalo Barriga, la zaga canaria no despejó de buena forma y la pelota le quedó a Muñoz, quien había ingresado para el segundo período, que definió con un derechazo al primer palo de David Reyes.
Quizás mucho premio para los celestes, ya que el amargo empate se ajustaba a lo que había sucedido en el encuentro. Pero el fútbol no sabe de justicias y sí de goles. O'Higgins ratificó la trascendencia de la pelota muerta y se quedó con la victoria.
La próxima fecha, el elenco dirigido por Cristián Arán recibirá al vigente campeón Universidad Católica en el Teniente.
En la vereda opuesta, San Luis mastica la amargura de dejar escapar dos puntos en la agonía y ya se enfoca en lo que será su choque de visitante ante Everton.