Todo el peso está en Neymar.
AFP
RÍO DE JANEIRO.- La selección brasileña de fútbol se juega este miércoles su futuro en Rio 2016. La Canarinha disputará ante Dinamarca un choque a todo o nada en la disciplina más importante para los brasileños, que tienen la espina clavada de no haberse colgado nunca el oro olímpico.
Para la Seleçao, el de Dinamarca será su partido más importante desde la humillación que sufrió 7-1 en casa ante Alemania, hace dos años.
Desde entonces, el fútbol sólo ha reportado miserias y penurias a un país acostumbrado a celebrar goles y levantar copas mundiales.
La selección de Neymar aún no conoce la victoria en el torneo. Ni siquiera ha logrado marcar un tanto, tras dos partidos, ante las débiles Sudáfrica e Irak. Después de los fracasos en su Copa del Mundo-2014 y las dos Copas América posteriores, la larga travesía por el desierto continuará... si Neymar no lo evita.
El crack del Barcelona es el blanco principal de las críticas por su fallido papel para conducir a la verdeamarela, inexpresivo y vacilante como el fútbol que practica el equipo del técnico Rogério Micale.
En Brasilia, hace unos días, el público abucheó a su equipo al grito de "Marta", "Marta", la estrella de la escuadra femenina.
Los sudamericanos, con 2 puntos, esta tarde necesitan ganar a Dinamarca en Salvador de Bahía para entrar en cuartos de final. El conjunto europeo suma 4 unidades. El empate no les asegura los boletos, pero también podrían avanzar con este resultado.