RÍO DE JANEIRO.- Los rostros de Kristel Köbrich y su entrenador Daniel Garimaldi no eran los mejores. Una hora después de haber competido en los 800 metros, tanto la nadadora como el argentino recién dejaron el Centro Acuático de Río.
El balance de ambos no es para nada bueno de lo que ocurrió en las aguas brasileñas. Y los dos coinciden en algo: el factor psicológico jugó un rol muy importante en el mal resultado.
Es más, Garimaldi hace con Emol una autocrítica al trabajo realizado. "Son cosas que yo lamento mucho porque es lo que realmente me pone mal, el esfuerzo que hace para tener un rendimiento X y cuando no lo logra por una cuestión que no es física me pone muy mal, porque es una falla nuestra, de no haber abarcado todo lo de Kristel. Hemos abarcado lo físico muy bien, algunas cuestiones psicológicas muy, pero parece que no alcanzó. tenemos que volver a trabajar con los psicólogos mucho más fuerte para hacerla una competidora realmente del nivel que ella tiene".
El argentino agregó que "las cuestiones psicológicas es una de las cosas que debemos abordar muy fuerte. No quiero hablar mucho porque no me parece bueno hablarlo porque decir cuáles son las debilidades de los deportistas no está bien. Lo trabajaremos para ver si realmente en algún momento podemos hacer que Kristel rinda en competencia como lo hace en entrenamiento".
Una de ellas es la presión. El entrenador se muestra disconforme, ya que su dirigida no ha podido repetir los buenos resultados de los entrenamientos en las competencias.
"Son muchos factores, no es sólo uno. Hay que abordar muchas cosas, que ya recién las estuvimos hablando un poco, algunas, no todas. Soy el que más quiere que Kristel refleje en la competencia lo que hace en el entrenamiento. Cuando eso pase, se van a sorprender muchas personas de lo que hará Kristel. Como se entrenó para ahora, no he visto a nadie entrenar así, pero el resultado fue muy malo, entonces hay algún factor psicológico en competencia que está haciendo que su rendimiento no se dé tal cual como entrena siempre. Siempre entrenó bien", comenta.
Y agrega que "nosotros de los países más chicos, Argentina, Chile, casi todo Sudamérica incluso Brasil, sentimos el peso de los países grandes en este tipo de competencias. Acá Estados Unidos, Inglaterra, Suecia y Hungría le hacen sentir el peso a los deportistas de lo que es realmente un torneo de estos. Contra este monstruo debemos trabajar. Estos animales de las potencias te hacen sentir lo que se vive alrededor".
En cuanto a la competencia en sí, Garimaldi analiza que "para nada conforme, fue un resultado muy malo. Ahora mismo vamos a analizarlo porque ella salió con mucha bronca, yo me quedé disconforme con el tiempo y queremos trabajar desde mañana pensando en el Mundial de Hungría. Ahora vamos a planificar todo el año para el año que viene".
Y ya quieren dar vuelta la página. "Seguimos mucho más unidos y potentes que nunca, queremos demostrar que lo nuestro no es puro 'bla bla', que es resultado a través de un gran trabajo que estamos haciendo. En algún momento lo tenemos que demostrar. Cada vez que le pasa algo como esto tenemos para mucho, sale con mucha bronca, muchas ganas. Mañana ya entrena de nuevo, lo mismo que pasó en Londres, no quiere tomarse ni medio día de descanso porque ya quiere competir", sentencia.