Isidora entrenando en Río.
Leonardo Vallejos, Emol
RÍO DE JANEIRO.- Muy relajada, escuchando música y subiendo cada vez más la intensidad de sus zancadas.
Isidora Jiménez realizó hoy una dura puesta a punto de cara a su debut olímpico del próximo lunes 15 de agosto.
A las 10:47 de Brasil, 09:47 de Chile, se bajó del bus que la transportó desde la Villa Olímpica al Estadio Engenhao. Fue la segunda vez que reconoce el recinto donde buscará hacer historia en los 200 metros planos.
Junto a la penquista, quien ayer cumplió 23 años, estuvo siempre su entrenador Carlos Moreno y su kinesiólogo Luis Fernández. Monitorearon cada uno de sus movimientos.
Vistió un polerón celeste, calzas azules y zapatillas rojas y siempre escuchando música pop arrancó con un suave trote alrededor de la pista de entrenamiento. Su rubia cabellera perfectamente tomada por un moño.
El calor comenzó a ser factor. Se sacó el polerón y quedó con una ajustada polera sin mangas con la bandera chilena
Poco a poco fue intensificando, imprimiéndole más velocidad a cada una de sus zancadas. Incluso se cambió a unas zapatillas fosforescentes que usa en la pista. Cada vez que le tocaba correr se golpeaba las pieras y muslos, algo ya típico en ella antes de cada carrera.
Ya a las 11:27 comenzó la segunda parte de su entrenamiento. Fue el turno de las salidas rápidas en curva. Saludó de beso a unos jamaicanos y siguió las órdenes de Moreno que le pedía explosión en el arranque y contaba paso a paso cada uno de los 200 metros que debía correr. Sus únicos descansos fueron cuando se sentó en unas bancas, a la sombra, y conversando con Fernández.
12:13. El momento de mayor velocidad. Se sacó las calzas y emprendió una rápida carrera por la distancia de su prueba. Se veía muy enfocada y con una muy buena salida. Terminó todo. Se sacó las zapatillas y caminó a pie descalzo por el pasto. Fue una hora y cuarto de mucha intensidad.
El del hoy fue su entrenamiento más potente desde que el lunes 8 llegara a Río de Janeiro.
Antes había realizado trabajos suaves dentro de la Villa y ayer salidas de taco en curva en el Engenhao.
Cabe recordar que la penquista clasificó gracias a su récord nacional de 22,95 que consiguió el año pasado en los Panamericanos de Toronto.
Mientras que en lo que va de este 2016 su mejor registro es de 23,07 obtenido en Cuenca, Ecuador.
Al lado de Jiménez también entrenaron grandes figuras mundiales, como el equipo jamaicano y el keniata David Rudisha, récord olímpico y mundial en 800 metros y medallista de oro eb Londres 2012.