Rafael Nadal se fue muy molesto tras perder el tercer lugar ante Nishikori.
EFE
SANTIAGO.- Amarga fue la jornada de ayer domingo para Rafael Nadal, donde luchó por el tercer lugar del singles en los Juegos Olímpicos ante Kei Nishikori.
Sin embargo, eso no fue lo único. Y es que el ex número uno del mundo vivió un momento de ira en pleno partido, donde se enfrascó en una dura discusión con el juez principal del encuentro, Carlos Bernandes, y con uno de los representantes de la ITF.
¿La razón? El permiso que le dio el árbitro a Nishikori para ir al baño antes de que comenzara el set definitorio, lo que se tradujo en que el nipón desapareciera por doce minutos de la cancha.
Tal demora provocó la rabia del hispano, quien las emprendió duramente contra el juez. "No me jodas", fue una de las tantas palabras que se alcanzaron a oír del tenista.
De hecho, una vez finalizado el cotejo donde el japonés se quedó con el bronce, Nadal, claramente ofuscado, alegó que "alguien debiera que controlar esto. A mí en Río de Janeiro no me dejaron ni arreglarme los pantalones. Me los puse al revés y no me dejaron arreglarme".