El regalo que recibió Bolt.
Leonardo Vallejos, Emol
RÍO DE JANEIRO.- No se quería ir de la pista. La recorrió de principio a fin con la cara llena de alegría y emoción. Sabía que era la última vez que correría en un Juego Olímpico "su" prueba, la que más disfruta.
Usain Bolt comenzó anoche su despedida. Y lo hizo en grande. Corrió más rápido que todos para cruzar la meta en 19.78 segundos. No rompió su récord, pero tuvo un sabor especial.
Esta vez no hubo chance de mirar para el lado. Sólo quería llegar primero. Tras esto comenzó su celebración. Música reggae por los parlantes y el "Rayo" inició su show
Siempre tuvo su bandera jamaicana y luego aceptó llevar también la de Brasil, el país que está siendo testigo de su despedida.
Saludó a cuanto fan se lo pidió en las tribunas. Jugó con las cámaras y al regresar en la meta hizo su característico gesto con sus manos de un rayo. Hasta un regalo recibió cuando le entregaron una réplica de él.
Más de una hora se hizo esperar en la zona mixta. Pasaban uno a uno sus siete rivales. Pero el que todos querían no aparecía. Hasta que su imponente figura apareció. Todos los flashes sobre él.
Atendió en seis lugares distintos a la prensa. Estaba feliz pero ya más tranquilo. La efervescencia había bajado tras someterse al examen de doping.
Agradeció a todos y se fue. Hoy tiene su gran despedida. Es en el relevo 4x100. Va por un nuevo oro y así alcanzar a Carl Lewis con más preseas en las pruebas de velocidad.
Lo de esta noche promete ser aún más emocionante...