Un historial de desencuentros.
AFP
SANTIAGO.- Históricamente son pocos los técnicos que han logrado tener una buena relación con José Mourinho, quien cada cierto tiempo saca una metralleta para disparar contra algún colega de turno. De eso saben por ejemplo -y de sobra- Guardiola y Pellegrini.
Otro de los blancos perfectos del portugués es el actual entrenador del Arsenal, Arsene Wenger, con quien lleva muchos años de tirantes declaraciones.
El intercambio de palabras, conatos en las canchas y algún que otro incidente han sido ya habituales entre los dos técnicos. Y de ello da cuenta el periodista británico Rob Beasley, uno de los hombres que conocen más a Mourinho, con el que se ha intercambiado mensaje, y que acaba de publicar un libro bajo el título de "Jose Mourinho, intimo y personal".
En este libro, Rob Beasley cuenta que las diferencias entre Wenger y Mourinho se iniciaron coincidiendo con el traspaso de Mata del Chelsea al Manchester United. Una operación que el entrenador del Arsenal criticó duramente ya que entendía que les perjudicaba. Mourinho lo vio como una obsesión de Wenger por todo lo que hacía el Chelsea, el gran rival de la ciudad de Londres.
"Es un especialista en el fracaso. No ha ganado un título en ocho años, es un fracaso. Si yo hago eso en el Chelsea, me tengo que ir de Londres y ya no regreso", comenta Mourinho en el libro.
En el escrito, el autor, comenta que esa sinceridad y honestidad de Mourinho le hizo mucho daño y lo veían como un hombre vengativo. El periodista revela en la obra que "unos días más tarde, Mourinho aún tenía en la cabeza lo sucedido con Wenger y me dijo: "cuando Wenger critique al Chelsea y al Manchester United por el traspaso de Mata...algún día me lo voy a encontrar fuera de un terreno de juego y le voy a romper la cara". Ese mismo día, Wenger fue humillado por el Chelsea de Mourinho con un contundente 6-0.
Posteriormente también se explica que en octubre de 2014, cuando el Chelsea ganó 2-0 y ambos se ensarzaron en el campo, Mourinho cuenta en el libro lo que le dijo a Wenger: "Le dije a Wenger: Aquí tu actuas así y sabes que yo no puedo reaccionar, pero te espero un día en la calle".