SANTIAGO.- La selección de Paraguay consiguió este martes un importante triunfo como visitante ante Argentina por la cuenta mínima (0-1), en el partido válido por la fecha 10 de las Clasificatorias rumbo a Rusia 2018 donde la gran figura fue el portero Justo Villar.
El duelo en Córdoba arrancó con un cuadro local buscando llegar con rapidez al arco defendido por el meta de Colo Colo, mientras los guaraníes se replegaban en campo propio apostando al contragolpe o al balón detenido.
Fue así como cayó el primer aviso de los visitantes. A los 7', Ángel Romero levantó un centro al área que cabeceó zambulléndose con una palomita Gustavo Gómez, pero su remate pasó desviado por poco del arco argentino.
Ángel Di María respondió con un disparo cruzado potente desde fuera del área, pero su tiro fue capturado, en doble instancia, por el guardavallas de la "Albirroja" que comenzaba así a pavimentar una brillante actuación.
A los 18' llegó el desnivel en el Mario Alberto Kempes. Argentina perdió un balón en la salida y Romero la filtró al área para que Derlis González se metiera en carrera. El atacante encaró al portero trasandino y se la puso abajo al primer palo, para anotar el 1-0.
A partir de entonces, el elenco de Francisco Arce se replegó en su campo y Argentina intentó con Ángel Di María como su hombre más incisivo.
A los 23', Javier Macherano recuperó en la salida y se la dio al atacante del Paris Saint Germain, quien se atrevió desde fuera del área con un zurdazo cruzado al segundo palo, pero el poste le dijo que no auxiliando a los guaraníes.
A partir de entonces, Di María siguió probando durante todo el primer tiempo con remates desde lejos, pero su imprecisión sumado a la férrea marca rival le impidieron llegar al gol a los locales.
La segunda parte arrancó auspiciosa para los dueños de casa, pues en el primer minuto del complemento el juez uruguayo Daniel Fedorzuck pitó penal para la "Albiceleste", tras mano de Paulo Da Silva en el área.
Sin embargo, el portero Justo Villar se convirtió en figura al contener el disparo de Sergio Agüero (46'), que le dio a media altura y a la izquierda del meta albo.
El portero guaraní pronto se volvió una pesadilla para la delantera argentina, pues a los 49' nuevamente ahogó el grito de gol de los locales al contener un remate a quemarropa del "Kun".
A los 54', el árbitro charrúa anuló un tanto de Marcos Rojo, tras la única equivocación de Villar, que salió mal a buscar un tiro de esquina. Pero Agüero estaba en fuera de juego.
El reloj avanzaba y la noche se le venía al equipo de Edgardo Bauza, que apostó por el ingreso del local Paulo Dybala y de Lucas Pratto, para quedar con cinco hombres en ataque. Pero Paraguay se defendió como sabe para cuidar el resultado que era histórico.
A los 77', Dybala se animó con un disparo lejano que se fue con potencia al arco de Villar, pero el portero despejó con los puños. El rebote le quedaba a Higuaín, que definió horrible y la estrelló sin arquero en el vertical, pero para su fortuna la jugada estaba invalidada por falta anterior de Pratto.
Finalmente, Argentina no logró nunca encontrar la llave para batir el cerrojo guaraní en una jornada donde extrañó más que nunca la ausencia de su capitán Lionel Messi. Los trasandinos terminaron resignando importantes puntos en casa, que los dejan con 16 unidades en el quinto puesto de la tabla, en zona de repechaje.
Por su parte, Paraguay completó 15 unidades y se mantuvo en la sexta plaza, un positivo por encima de Chile (14), que venció por 2-1 a Perú en el Estadio Nacional de Santiago con un doblete de Arturo Vidal (9' y 84').
En la próxima jornada, el cuadro de Arce recibirá al combinado incaico en Asunción, mientras que la "Albiceleste" tendrá que enfrentar un duro escollo como visita ante Brasil, en una nueva versión del clásico de América.
De esta forma, Bauza tiene por delante un difícil panorama que revertir, en caso de que siga al mando de Argentina cuando la paciencia al otro lado de la Cordillera parece agotarse. Situación que quedó demostrada en las pifias con que despidieron a su selección al término de cada tiempo, sobre todo al final cuando se cerró la derrota.
