Pizzi está tranquilo, contento. Siente que su mensaje ha sido plenamente comprendido por sus dirigidos.
Álvaro Inostroza, ANFP
SANTIAGO.- El pasado martes 11 de octubre Juan Antonio Pizzi, luego del sufrido triunfo ante Perú, sorprendía a todos confesando que había puesto su cargo a disposición de la ANFP. El técnico estaba cansado de las críticas y cuestionamientos.
"Se ha esgrimido una instalación de mentiras, algo que es muy perjudicial para la selección y para el objetivo de llegar al Mundial. He hablado con Arturo Salah y tiene mi cargo a disposición, el que queda exento de cualquier especulación económica", anunciaba aquel día en la sala de prensa del Estadio Nacional.
Horas antes la decisión del entrenador sorprendía al presidente de la ANFP, sin embargo, la directiva no estaba dispuesta a que partiera y le entregaba todo su respaldo para que siguiera firme en su puesto.
Pizzi reconsideraba su decisión y al ver el espaldarazo de Salah y compañía optaba por continuar al mando de la "Roja".
Según confiesan cercanos al técnico, "esa decisión no la tomó como medida de presión ni mucho menos, era lo que sentía necesario y a la larga le sirvió para trabajar con tranquilidad de cara a lo que venía".
Así fue como el DT continúo con sus labores en Juan Pinto Durán. Planificó el viaje a Barranquilla decidiendo partir a Colombia dos días antes del partido con el objetivo de aclimatarse al sofocante calor y tener un entrenamiento en la cancha del Estadio Metropolitano.
También se encargó de elaborar su nueva nómina de cara los duelos frente a los cafeteros y a Uruguay. Esa lista de citados estuvo marcada por la ausencia de Jorge Valdivia.
A esa altura Pizzi trabajaba tranquilo, pero sabiendo que se venían dos lances ante rivales directos en el camino al Mundial y que una negativa actuación en esta fecha doble dejaría a Chile muy lejos de Rusia.
Pero esa presión interna tuvo un alivio cuando la FIFA comunicó que le daba a la "Roja" el triunfo por "secretaría" sobre Bolivia. Si bien hasta hoy el técnico sigue siendo cauto con lo que pase con el fallo, esa decisión fue un golpe de confianza previo a lo que venía, ya que la selección pasó de estar fuera de la cita planetaria a quedar en zona de repechaje.
Con este escenario, ahora quedaba en manos de la escuadra nacional aprovechar la doble fecha y hacer su trabajo. Y así fue, pues el empate ante Colombia y el triunfo sobre Uruguay dejaron a su equipo en zona de clasificación directa al Mundial.
En tan sólo un mes Pizzi pasaba de estar fuera de Rusia y de poner su cargo a disposición de la ANFP, a devolverle la ilusión a la "Roja" y reafirmar la confianza de jugadores y directivos en su trabajo.
"Él siempre ha tenido confianza, sabía que si bien las cosas no se estaban dando, era algo de tiempo. Hoy está tranquilo, contento, porque no sólo ve a Chile con muy buenas opciones de ir al Mundial, también ve cómo los jugadores entendieron su mensaje", sostienen cercanos a "Macanudo".
La vida le vuelve a sonreír a Pizzi. Nunca perdió la confianza, pero sí vio como los cuestionamientos "perjudicaban" y hacían tambalear su proceso. Sin embargo, eso ahora es cosa del pasado.