Gran momento del volante de 22 años que hoy está en la lista de Pizzi.
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SANTIAGO.- Martín Rodríguez estaba feliz. Hace pocos minutos acababa de conquistar el título de la Copa Chile y su alegría era absoluta. Para él, la corona era un premio al esfuerzo.
"Nos merecíamos esto por lo que veníamos haciendo. Estoy muy contento de terminar el año de esta forma", declaraba a Emol el volante mientras celebraba en la cancha del Nacional.
El oriundo de Diego de Almagro finalizaba un año que fue de menos a más con un título y siendo clave en el Cacique con un gran rendimiento que, incluso, lo ha llevado a la selección chilena.
El crecimiento del joven de 22 años fue significativo en la segunda parte del año y se dio de la mano de Pablo Guede, quien llegó a la banca de Colo Colo para el segundo semestre.
Entre la algarabía de los festejos, Rodríguez agradece precisamente a su entrenador y recuerda una íntima conversación que tuvo junto a él y que, admite, fue clave para subir su rendimiento.
"Un día el profe me llamó para conversar. Yo no andaba del todo bien, pero él me dijo que tenía que confiar en mí, que tenía capacidades y que tenía que creer en eso para poder sacar mi mejor nivel. Y así fue", resalta antes de seguir dando la vuelta olímpica.
El talentoso volante continúa con los festejos en la cancha de Ñuñoa, pero antes de partir rumbo a otro sector de la cancha responde una última pregunta.
"Hoy estoy feliz. Quiero seguir creciendo y aprendiendo para desarrollarme como jugador", cierra uno de los campeones de la Copa Chile.