Del Porto consuela a Almagro.
AFP
SANTIAGO.- El momento más emotivo de Roland Garros 2017 se vivió este jueves en el duelo entre Juan Martín del Potro y Nicolás Almagro.
Ambos tenistas disputaban el duelo válido por la tercera ronda del Grand Slam cuando una lesión impidió que el tenista español siguiera disputando el encuentro.
El jugador hispano acababa de ganar el tercer set y se ilusionaba con darle pelea al argentino, sin embargo, su rodilla una vez más lo traicionó.
Almagro pidió asistencia tras ganar el primer juego y, desde ese momento, su rodilla fue cada vez a peor. Incluso, se trastabilló en un momento del partido hasta que, finalmente, decidió parar.
Desde el fondo de la pista, el español renunció a correr a un saque de su oponente, dobló el tronco, se echó las manos a la cara y su llanto se escuchó en toda la cancha.
Finalmente se tiró de espaldas a la arcilla francesa para estar varios segundos sin moverse. El árbitro y el propio Del Potro acudieron a ayudarle.
Ya era evidente que Almagro no podía seguir y sus gestos de rabia así lo ponían de manifiesto.
Si bien volvió a recibir asistencia, el español definitivamente no pudo seguir y una vez más estalló en llanto sentado en su banca. Hasta allí llegó una vez más el argentino para brindarle su apoyo.
Después de varios minutos, Almagro se puso de pie, tomó sus cosas y emprendió caminó a los vestuarios en medio de una gran ovación del público presente.