SANTIAGO.- Mano dura contra los hinchas. Eso es lo que pretende lograr el nuevo protocolo que busca sancionar el comportamiento inadecuado de los forofos al interior de los estadios chilenos.
El código de conducta, que tiene como nombre "Protocolo de Aplicación del Derecho de Admisión", fue aprobado por el Consejo de Presidentes de Clubes el cual establece una "lista negra" de 41 conductas inapropiadas de los hinchas que -si se aplica el nuevo modelo- les impedirá el ingreso a los recintos deportivos de todo Chile por períodos que van desde los 6 meses hasta los 5 años.
Según informó El Mercurio, la escala de sanciones establece 5 faltas consideradas leves (castigadas con seis meses de prohibición de acceso a los coliseos), 11 menos graves (un año), 12 graves (dos años), 12 muy graves (tres años) y una gravísima (cinco años).
Ejemplos hay varios: Intentar ingresar un lienzo o instalar uno en las rejas del coliseo e incluso no respetar la ubicación en la tribuna implicará una prohibición de acceso a los estadios de seis meses.
Usar un puntero láser, incitar a la violencia, trepar a las rejas provocando la interrupción del partido o "robar" balones que salgan de la cancha conllevan una "pena" de un año fuera de los recintos deportivos.
Pero hay más. Quien grite "expresiones de carácter discriminatorio a cualquiera de los participantes del evento deportivo" arriesga dos años fuera de los estadios, de la misma manera que quien ingrese "lienzos de carácter xenófobos o homofóbicos y/o participe en cánticos con esa connotación".
Portar o encender bengalas dentro del estadio, así como ingresar a la cancha sin autorización, además de amenazar o escupir a un jugador o miembro del cuerpo técnico, implican un castigo por tres años, del mismo modo que ser sorprendido "secuestrando" un bus de transporte público para llegar a un partido.
Se amplía el rango de acción de los clubes
El documento fue trabajado al menos seis meses por la ANFP y una comisión de equipos. De hecho, fueron los propios directivos de clubes los que consensuaron el listado de 41 conductas punibles y establecieron las penas asociadas.
Al cabo, el Consejo de Presidentes aprobó el "protocolo" el pasado 29 de agosto, texto que amplía el rango de acción tanto de los clubes como de la ANFP para sacar de los estadios a los hinchas de mal comportamiento sin la necesidad de pasar por la justicia ordinaria.
De acuerdo al documento, la idea es evitar que hinchas "sorprendidos y denunciados por funcionarios policiales por cometer delitos o faltas como desórdenes, falsificación de entradas u otros, queden bajo medida cautelar de citación, siendo sus causas posteriormente cerradas por el Ministerio Público", señala el texto, que desde este mes está en poder de todos los clubes.
Cómo opera el código de conducta
Para ejercer el derecho de admisión, los clubes u organizadores del espectáculo deben tener pruebas o "antecedentes que acrediten las circunstancias", entendiéndose como tales partes policiales, fotografías o videos, copias simples de resoluciones judiciales nacionales o extranjeras, denuncias firmadas por los clubes o por otros asistentes, como también "declaraciones escritas y firmadas por el jefe de seguridad, supervisores, encargados, guardias de seguridad o controles de acceso", entre otros.
El derecho de admisión se deberá ejercer "a más tardar dentro del plazo de 7 días corridos desde la toma de conocimiento de la ocurrencia del hecho".
El club denunciante debe aportar los medios probatorios, y el afectado tendrá derecho a conocer las pruebas en su contra.
El hincha castigado -si no se entera al momento de comprar su entrada- debe ser notificado vía e-mail, correo certificado o incluso por los controles del estadio o jefes de seguridad de cada club, y en la notificación no solo deben estar los hechos fundantes, sino además se debe informar los mecanismos para revertir la prohibición.
El protocolo también establece una exigencia a los clubes y a la ANFP: además de denunciar cuando proceda, deberán informar el código en los accesos de los estadios y mantener un canal en sus sitios web para que los hinchas consulten si pesa sobre ellos la prohibición.