Acostumbrado al espionaje, dicen.
Reuters
SANTIAGO.- Las acusaciones de espionaje han sido parte de la carrera de entrenador de Jorge Sampaoli. Es que para el técnico argentino saber cómo trabajan sus rivales siempre es de suma importancia.
Y ahora en la previa del duelo entre Argentina y Perú, clave para ambos países en su lucha por ir al Mundial, la situación no es diferente. Al casildense ya se le acusa de mandar infiltrados a Lima.
Pero más allá de lo que la mayoría de las veces ocurre a escondidas, hay un personaje que se ha encargado de revelar cómo operó cuando trabajó como espía del ex entrenador de la "Roja".
El ex futbolista y actualmente DT del Escuela Municipal Binacional, Fredy García, entregó detalles desconocidos de la faceta de infiltrado que desarrolló cuando trabajó con Sampaoli.
"Petróleo", como era conocido, contó que se hizo pasar hasta por cargador de frutas en la época en que el casildense dirigía a Coronel Bolognesi en Perú.
"Era una cuestión remunerada. Fue una iniciativa mía ir como un periodista o como un alumno de educación física, y otras como un cargador de un camión de frutas en el Cuzco", contó en diálogo con la radio RPP.
Y profundizó en esta particular faceta: "Cienciano era el siguiente rival y por eso me mantuve toda la semana en el Cuzco. Al costado del estadio San Gerónimo paraban los camiones de frutas de Puerto Maldonado".
"Como no podía ingresar nadie a los entrenamientos y el objetivo se tenía que cumplir, le hablé al dueño de un camión, que me prestó una escalera y, con un saquillo embarrado en la cabeza, desde arriba del camión pude divisar a todos los jugadores y los trabajos que hacían adentro mientras las empleados descargaban las frutas", confesó.
García también dio detalles de cómo era su relación laboral con el actual técnico de la selección de Argentina.
"Le mandaba la información para que él pudiera trabajar. Pero no era con el único que hablaba. Me enteré que también trabajaba con cierta prensa local que le corroboraba lo que yo le daba, además de contrastarlo con lo que podía captar a través de otra gente. No quería que nadie lo sorprendiera ni engañara", recordó.