Cristóbal Guldman asegura que corre el "verdadero" Dakar.
Martín Gutiérrez, Emol
LIMA.- Se dice que es la categoría madre del Rally Dakar. La que resume la verdadera esencia de la prueba más peligrosa del mundo y en la que los pilotos están obligados a llevar su fuerza física y mental a niveles impensados.
Es la categoría Malle Moto, formato originaria de la competición y en la que los pilotos, en un formato despiadado, no reciben asistencia en caso de tener un problema en la ruta.
Se las tienen que arreglar con lo que sea y en completa soledad en medio de la nada. Con suerte reciben una que otra ayuda solidaria, pero no tan experta de los fanáticos presentes en los inhóspitos caminos.
Hasta esta nueva versión, sólo un chileno había participado. Yamir Ortiz lo hizo en 2013 arriba de una moto Honda.
Este 2018, Cristóbal Guldman se convirtió en el segundo nacional en hacerlo, tras finalizar con éxito la especial de 31 kilómetros de la etapa inicial entre Lima y Pisco.
Con su Kawasaki, Guldman espera lograr su objetivo mínimo: Llegar a la meta en Córdoba. "Me hace más sentido correr esto. Es bien de machos y sacrificado. Es una categoría donde todos estamos en igualdad de condiciones. El resultado final es producto de la mezcla de excelente estrategia y estado físico", explica.
El nacional, quien ya acumula tres Dakar, profundiza en este punto. "El desafío de terminar un Dakar ya lo cumplí. Ahora quiero hacerlo en esta categoría. Es un desafío mucho más grande. La idea es terminarlo y en el futuro ganarlo", profundiza.
¿Cómo podría desenvolverse en este formato? Guldman entrega la receta. "Hay que aprender todo lo que tiene que ver con las técnicas, toma de decisiones. Se necesitan muchas artimañas", apunta.
Además, deja en claro que no es una categoría en la que espera dar pena por la soledad que implica estar sin asistencia en desierto, altura y temperaturas extremas.
"No es algo para dar lástima. Al contrario es para machos y además se da algo muy lindo con el público. Te entrega el apoyo mental y hasta ayuda si tienes problemas físicos", explica.
De esta manera, Guldman espera ir paso a paso en esta nueva primera vez que vive en el Dakar, tras haberse estrenado en la edición de 2015.
