SANTIAGO.- Neymar está en el ojo del huracán. La burlesca acción del astro brasileño contra un jugador del Rennes, por la Copa de la Liga, sigue dando la vuelta al mundo.
Son muchas las críticas que ha recibido el delantero del París Saint Germain, quien sacó la voz para justificar su polémico actuar ayer martes.
Pero lejos de calmar la situación, el ex atacante del Barcelona le puso más condimento a esta bullada historia.
"El fútbol es un poco aburrido, porque no podemos hacer nada, todo es polémico. Al final hice una broma dando mi mano a un rival y quitándosela en el último momento", partió diciendo en su defensa.
"Esto generará polémica aunque sé que es el tipo de cosas que hago con mis amigos. Y si lo hago con ellos ¿Por qué no lo puedo hacer con mis rivales? Estoy bromeando, es una broma", agregó.
Neymar quería hablar, quería justificar su actuar y en ningún momento se mostró arrepentido. Es más, continúo con sus argumentos.
"Ellos dan patadas y yo juego fútbol. Provocan, pero yo también sé cómo provocar a mi manera con el balón. Me defiendo con el balón. Sé que dirán que puedo ser un buen jugador pero que provoco demasiado. Sé que él dirá eso, pero con patadas no nos detendrán. Los provocaré aún más para ganar mi equipo", lanzó para cerrar su discurso.
