SANTIAGO.- Tiene 23 años y ya es un emblema en la escalada deportiva a nivel sudamericano. El chileno Facundo Langbehn nació en una familia especialista en la disciplina y ya logró completar una de las hazañas más complejas en boulder.
Hoy anhela representar al país en los Juegos Olímpicos Tokio 2020, luego que este deporte fuera incluido en la próxima cita de los cinco anillos
Sin embargo, pese a tener auspicio privado, su sueño se está derrumbado debido a las carencias de condiciones de profesionales que existen en Chile y la falta de apoyo por parte del Estado.
La aventura desde pequeño
Se crió rodeado de escaladores, porque su madre, Laura Ferro, comenzó a practicar este deporte cuando Facundo tenía cuatro años y su hermana Soho, quien también es reconocida en la actividad, tenía seis.
A eso se suma que su progenitora conoció a su actual pareja, Sergio "Keko" Quiroga, uno los mejores en la disciplina en los 90', y éste les transmitió la pasión de la escalada.
"Nosotros acompañábamos a mi mamá y nos colgábamos en alguna roquita, pero nada más que para jugar", comentó el joven especialista en boulder a Emol. Cabe destacar que esta es una modalidad en la que se escalan en pequeña altura, sin cuerda y no se necesita mucha potencia.
"Cuando eramos chicos, todos los amigos del 'Keko' eran los mejores de Chile y nosotros comenzamos a mirarlos como ídolos", recordó.
En primero medio, después de años de viajes, experiencias y prácticas siendo un niño, Facundo compitió por primera vez en copas del mundo y con 15 años ya estaba forjando su camino para de los mejores del país.
Salió del colegio, se tomó un año y entrenó como nunca antes. Pero después se dio cuenta que también tenía otra pasión: la agronomía, carrera que estudia en la Universidad Católica. "Me gusta lo que estudio e intento estar al ritmo de mis compañeros y sacarme buenas notas, pero es difícil porque para la escalada necesito un esfuerzo extra", aseguró Langbehn.
"A la escalada le dedico más tiempo en las vacaciones. En invierno, un mes, y en verano 3 meses. Ahí me dedico a viajar, entrenar y buscar más rutas", añadió.
Impedimento a nivel país
Por otro lado, el objetivo a largo plazo para Facundo está enfocado en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. "Llevar el escudo del país sería un sueño para mí", dijo.
La escalada será a partir del próximo certamen internacional uno de las nuevos deportes a competir, junto con el béisbol/sóftbol, surf, karate y monopatín.
La clasificación a los JJ.OO. para esta disciplina consiste en 20 cupos ( tanto hombres como mujeres) para todo el mundo, con un máximo de tres por país. Pero para Facundo, Chile no tiene oportunidad para estar en la cita planetaria, pese a catalogarlo como el mejor país en la especialidad en Sudamérica.
La razón: No existe el apoyo necesario del Estado para cubrir la preparación necesaria, a dos años de que comience el certamen olímpico.
"Recibo auspicio privado y ellos me ayudan en todo. Pero esto es distinto, no existe una federación estructurada que puedan cubrir los gastos y los entrenadores", señaló. En esa misma línea, dijo que los exponentes a nivel europeo "vienen entrenando desde los 14 años", aclaró.
Hoy la escalada está dentro de la Federación de Andinismo de Chile (FEACH), que incluye el montañismo también, y no una propia. Aunque a partir de 2016 se está conformando, pero han tenido un sin fin de problemas para concretar su creación.
Además, Langbenh afirmó que para poder concurrir a prepararse y luego competir en un nivel para alcanzar posibles medallas, tendría que congelar sus estudios y postergar la mayor cantidad de proyectos personales.
"Si me llaman para representar a Chile, tienen que existir las condiciones tales, que yo pueda asegurarme que voy a tener posibilidades y el apoyo necesario para lograrlo", afirmó. "Si es así, lo pienso y voy".
La hazaña que lo marcó como exponente
En el boulder, las graduaciones parten desde el V0 hasta el V17. "El aumento de las categorías las determinan un grupo de escaladores que llegan a un acuerdo en común, según la dificultad. Ellos viajan, ven la ruta y la catalogan", contó el escalador.
Actualmente, el V15 es la segunda más complicada del mundo. La primera es el V17 que solamente la alcanzó Nalle Hukkataival de Finlandia y que "está en otro nivel en comparación con el resto", según Facundo.
A fines del 2017, Langbenhn se convirtió en el primer chileno en encadenar un V15 y en el segundo sudamericano.
Lo hizo en Red Rocks, Parque Nacional ubicado en Las Vegas, Estados Unidos. Un lugar icono de la escalada, donde solo cuatro escaladores de diferentes partes del globo lo habían alcanzado.
Fueron varios intentos y varias temporadas para poder lograr el gran objetivo. El deportista tenía estipulado una serie de viajes para poder hacerlo.
Sin embargo, esas oportunidades se acabaron y Facundo estuvo a punto de desistir de lograr la hazaña. "Cuando era chico y veía esa ruta, me propuse hacerla algún día", recalcó.
Y lo logró: "La recepción de la noticia no me la esperaba. Me publicaron en revistas de distintas partes del mundo, y en Chile la gente (que conoce de la disciplina) me reconocía en la calle", añadió.
Ahora volvió al país para participar del The North Face Master de Boulder, el campeonato de escalada más grande a nivel sudamericano, que se realizará en Santiago a fines de marzo. Vienen grandes competidores de todo el mundo y el año pasado, en dicho torneo, Facundo salió tercero, pero esta temporada va por la revancha.