Preocupante escenario del Cacique.
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SANTIAGO.- Al igual que ante Palestino en la fecha pasada, Colo Colo nuevamente se quedó sin celebrar en el Campeonato Nacional tras sólo igualar 1-1 con O'Higgins en el estadio Monumental.
El resultado dejó a los albos con siete puntos en la tabla y con la posibilidad de que la UC se le escape en el liderato del torneo si los cruzados vencen hoy sábado a Unión La Calera.
Pero como el certamen es largo, el Cacique todavía tiene margen de error. Donde no tiene espacio para dudas es en su debut por la Copa Libertadores, cuando el martes reciba a Atlético Nacional de Colombia.
Y en ese sentido, los dirigidos por Pablo Guede sumaron más interrogantes que certezas. El tema defensivo otra vez no fue solucionado y ya se hace patente la "Barrosodependencia" en el esquema del DT argentino.
La ausencia del defensa es demasiado notoria en el dibujo táctico de los albos, que ante O'Higgins puso una retaguardia distinta a lo que presentó ante Palestino. En dicha ocasión, Claudio Baeza actuó como último hombre.
En el cotejo de ayer, Guede probó a Juan Manuel Insaurralde como líbero y el trasandino tampoco entregó seguridad en la zaga. El ex Boca se vio lento, aunque de todas formas el gol no pasó por un error de él.
Gabriel Suazo fue el protagonista de aquella jugada en la que Nicolás Mazzola abrió la cuenta. Un error en la salida alba, cuando el partido no tenía muchas emociones.
Un problema que ante los colombianos puede lamentarse aún más, considerando la envergadura del rival y ese ritmo de mayor calibre que otorgan los torneos internacionales.
De todas formas, ayer el Cacique se vio más equilibrado con el ingreso de Jaime Valdés, uno que seguramente ante Nacional será de la partida. Además, frente a los cafetaleros lo más probable que también será titular Esteban Paredes, quien le da peso a la ofensiva blanca.
Pero eso es lo único rescatable del duelo de anoche. Colo Colo no demuestra seguridad y ahora Guede en tres días deberá dar con la tecla para solucionar los yerros.
Pese a esto, el entrenador albo sigue firme junto a sus jugadores y les entregó un espaldarazo en la conferencia posterior al choque con los rancagüinos. "La duda mata al hombre...Si voy a tener duda de este plantel, sería una falta de respeto", dijo el ex San Lorenzo, queriendo sacarle presión a sus pupilos.
Habrá que ver cómo el trasandino se las ingenia para solucionar este dolor de cabeza que la ha dado la desafortunada lesión de Barroso...
