Una situación dramática vivió Ortiz.
Pantallazo
SANTIAGO.- Un futbolista argentino, de la Primera B Metropolitana del país trasandino, se cansó de los malos tratos y la violencia por parte de la hinchada del club en el que jugaba.
El caso se trata de Cristian Ortiz, quien después de una grave acción de la barra del club San Miguel, decidió rescindir su contrato con el cuadro donde estaba.
Esto lo hizo después de que un grupo de cinco fanáticos entraran a la fuerza al entrenamiento del elenco en el estadio Malvinas Argentinas para amedrentar al plantel por el mal rendimiento en el campeonato.
Estos forofos dispararon tres veces hacia el pasto y les exigieron "más actitud" al equipo, el cual está en el puesto 15 de la tabla.
"A todos los queridos y verdaderos hinchas de mi querido Trueno Verde quiero agradecerles tantas muestras de cariño y respeto durante estos tres hermosos años vividos en el club", dijo Ortiz.
Y agregó que "en el día de hoy y con mucho dolor decidí dejar el club por no negociar ni poner en riesgo los principios que desde chico me enseñaron mis padres, el respeto y la seguridad de mi familia y mis compañeros, y por sobre todo que jugar al fútbol debe ser motivo de alegría y no de temor", cerró el deportista.
