NICOLOSI, Italia.- Por fin comenzó la lucha entre los favoritos en el Giro de Italia. El ascenso al volcán Etna, en la sexta etapa de la carrera, fue el escenario para que se dejaran caer los ataques, tras los cuales el colombiano Esteban Chaves y el británico Simon Yates, ambos del equipo Mitchelton Scott, sacaron los mejores dividendos: el primero ganó la etapa y el segundo se adueñó de la camiseta rosa de líder.
Yates, que ocupaba el tercer puesto en la salida de la etapa, cuenta ahora con 16 segundos de ventaja sobre el holandés Tom Dumoulin (Sunweb), segundo de la general, y con 26 de margen sobre el mismo Chaves, tercero y que escaló 11 posiciones en la clasificación general. Más atrás quedaron el italiano Domenico Pozzovivo (Bahrein), a 43 segundos; el francés Thibaut Pinot (Groupama FDJ), a 45; y el australiano Rohan Dennis (BMC), a 53. El británico Chris Froome (Sky) está octavo a 1:10 minutos.
Para la victoria de etapa, Yates alcanzó a Chaves en el último kilómetro del ascenso y lo acompañó hasta la línea, que cruzó justo después.
Pinot lideró el primer grupo de perseguidores, en el que estaban otros favoritos de la carrera, especialmente Froome, que quedó descolgado varias veces en la subida, pero en todas ellas consiguió reengancharse, igual que el campeón de Italia, Fabio Aru (UAE Emirates).
Chaves había formado parte de un grupo de 28 corredores, escapados después de unos cincuenta kilómetros y con los que llegó con una ventaja ligeramente superior a un minuto a los pies del Etna (subida de 15 km con un desnivel medio del 6,5%). El colombiano distanció a sus compañeros a 5,5 kilómetros de la meta.
Subcampeón del Giro en 2016, donde llegó a lucir la "maglia rosa" a dos días del final, Chaves ganó a sus 28 años su segunda etapa en el Giro, después de la que se llevó hace dos años en Corvara, en los Dolomitas.
Por su parte, Simon Yates, de 25 años y séptimo en el Tour de Francia de 2017, se vistió por primera vez con el jersey de líder de la general en una competición que disputa este año por primera vez.
Este viernes se disputará la séptima etapa, propicia para una llegada al sprint, con un recorrido calabrés de 159 kilómetros, entre Pizzo y Praia a Mare.
