La máxima autoridad quiso estar presente.
Por Javier Ugarte, enviado especial
VILLA TUNARI.- "Sí, está confirmado. Viene el Presidente". A las 17:00 horas desde la organización del tenis de los Juegos Sudamericanos Cochabamba 2018 informaron que a la final del mixto y dobles femenino vendría el Mandatario de Bolivia, Evo Morales.
Y así fue. Morales ingresó al court central de Villa Tunari y el público presente, cerca de 200 personas, se mostró respetuoso y no hubo pifias como las que recibió durante la inauguración de los Odesur, el pasado sábado.
Acompañado por el presidente del Comité Olímpico de Bolivia, Marco Arze, y el ministro de Deportes, Tito Montaño, Morales se sentó tranquilamente en el sector preferencial.
No pasaron ni diez minutos y una pequeña se le acercó para pedirle un autógrafo, al que el Presidente accedió con total amabilidad.
Tras esto, siempre siguió atento el partido final del tenis mixto, pero donde más vibró fue en el doble que ganaron las chilenas Daniela Seguel y Alexa Guarachi la medalla de oro.
Aplaudía cada punto que ganaban las nacionales sobre las paraguayas Montserrat González y Daniela Giangreco. A ratos hablaba por celular, mientras dos policías uniformados y dos de civil resguardaban su seguridad.
Poco antes de dejar el recinto deportivo, un niño le pidió una fotografía y nuevamente el Presidente de Bolivia no tuvo problemas para sacársela.
Final del partido que le daba la presea dorada a las chilenas y Morales aplaudió de pie la victoria. Se retiró sin inconvenientes, aunque antes de salir del court envió un mensaje: "Tenemos la obligación de compartir deportivamente y socialmente como pueblos con los hermanos chilenos".
