COCHABAMBA.- Su alegría era total. Los ojos con lágrimas lo decían todo. La medalla de oro que ganó Pamela Salman en el tiro al vuelo de la prueba trap de los Odesur de Cochabamba dejó al Team Chile con 26 preseas doradas, a sólo una de igualar las obtenidas en Santiago 2014.
Bajo una fuerte lluvia que caía en la Villa Sudamericana, esta oncóloga de 53 años y madre de dos hijos no ocultó su felicidad y emoción por tal logro. "Desde hace tres años que no competía. Mi último torneo fueron los Panamericanos de Toronto donde salí séptima, pero volví hace ocho meses y ahora logro esto. Un oro que me tiene tremendamente feliz, porque también clasifiqué a los Panamericanos de Lima".
Está feliz, pues para ella el "gran esfuerzo y sacrificio que uno hace para llegar de la mejor forma acá es brutal, teniendo en cuenta que no tenemos entrenador y no hemos podido viajar a ninguna competencia internacional. Lamentablemente la federación y el Comité Olímpico están apoyando al skeet con un entrenador solo para esa modalidad. Esperemos que con este oro nos apoyen con un técnico".
A ratos se emociona, sobre todo cuando recordó con Emol que después de Toronto "no quise competir más. La verdad que quedé mal, se murieron mis padres muy seguidos y decidí no disparar más. Guardé la escopeta dos años, pero por mi hijo, que tiene 13 y también dispara, volví a entretenerme hasta que me di cuenta que seguía disparando bastante bien. Fue así que con el apoyo de la familia y de los colegas del trap pude empezar a entrenar fuerte".
Y sabía que si le daban la oportunidad de llegar a los Odesur no iba a fallar. "Siempre pensé que me iba a llevar la medalla de oro. Yo vine a Cochabamba a ganar, no a otra cosa. Independiente que no tenga entrenador, preparador físico y psicólogo, yo volví al tiro para ganar…".
Si bien asegura no sentir "molestia con la federación" aprovecha la oportunidad de enviarle un mensaje: "Espero que nos ayuden con viajes para competir al exterior, ya que si uno compite afuera te pasa la cuenta. De hecho, acá pude haber disparado muchísimo mejor si hubiera tenido torneos en el cuerpo. No pido ir a Europa, como lo hace el skeet, sino que a Perú, Panamá o Brasil, como lo hacíamos antes. Ojalá lo podamos lograr".
Por ahora, Pamela sólo quiere disfrutar y reencontrarse con su familia para celebrar este "tremendo oro", aunque tiene claro cuáles serán sus próximos desafíos. "Me voy a ganar el cupo olímpico, sé que voy a cumplir el sueño de estar presente en unos Juegos Olímpicos".