SANTIAGO.- Rusia humilló a la Arabia Saudita de
Juan Antonio Pizzi y la goleó por 5-0 en el partido inaugural del Mundial de Fútbol 2018. Un golpe duro para el ex técnico de la selección chilena.
Y el santafesino debería estar alerta. Sí, porque
los árabes ya tienen un antecedente que demuestra que no los tiembla la mano a la hora de tomar drásticas decisiones.En el Mundial de
Francia 1998 "los hijos del Desierto" eran entrenados por el
brasileño Carlos Alberto Parreira, quien llegaba como campeón planetario tras formar parte del staff técnico de Mario Zagallo en Estados Unidos 1994.
Pero no le fue para nada bien. Cayó por la cuenta mínima ante Dinamarca y luego fueron goleados 4-0 por Francia. Ahí la dirigencia árabe no aguantó.
Tomó la drástica medida de despedir a Parreira, en medio del Mundial, cuándo aún no finalizaba la fase de grupos.Fue así como el lance final de esta ronda estuvo en la banca Mohammed Al-Kharashy. Y fue el mejor resultado, ya que igualaron 2-2 con Sudáfrica. ¿Pasará lo mismo ahora con Pizzi?
Tras la goleada sufrida a manos de Rusia,
fue la primera pregunta que le hicieron al argentino, si temía que lo despidieran. Su cara empeoró aún más y no ocultó su molestia."Es muy buen su pregunta, sobre todo para mi estado de ánimo", comenzó diciendo en tono irónico.
Y agregó "tengo una filosofía de trabajo en la cual me preocupo de hacer lo mejor posible y todo lo que esté a mi alcance trato de hacerlo de la mejor manera posible. Decisiones que no están en mis manos están fuera de mi alcance, yo seguiré trabajando, confío plenamente en lo que hemos hecho y en lo que pueden hacer y en que vamos a tener una mejor perfomance en el próximo partido".
El futuro se ve complicado.
El próximo miércoles 20 de junio chocarán con Uruguay, donde Luis Suárez y Edinson Cavani son sus principales amenazas. Terminará el lunes 25 de junio contra el Egipto de Mohamed Salah.