Ahora sí detuvo el duelo.
Reuters
SANTIAGO.- Independiente de Francisco Silva y Pablo Hernández se clasificó este martes a los cuartos de final de la Copa Libertadores luego de empatar sin goles con el Santos, en un duelo que a 12 minutos del final fue suspendido por el árbitro chileno Julio Bascuñán por los incidentes provocados por algunos fanáticos del club brasileño.
La serie resultó afectada por la decisión de la Conmebol, horas antes del comienzo del partido de vuelta, de conceder a Independiente los tres puntos y una victoria por 3-0 en la ida en Buenos Aires, en lugar del 0-0 que resultó en la cancha.
El conjunto rojo de Avellaneda, que contó con los volantes chilenos todo el encuentro, se enfrentará en la instancia de los ocho mejores con el vencedor del duelo entre los también argentinos Racing y River Plate, por lo que habrá al menos un representante de ese país en las semifinales del torneo.
Santos intentó sin éxito la remontada en el estadio Pacaembú ante una afición que pedía venganza tras la decisión de la Conmebol, que hoy declaró a la escuadra paulista perdedora por 3-0 del partido de ida por alinear de manera irregular al uruguayo Carlos Sánchez.
Con más emoción que fútbol, el partido estuvo marcado por las constantes interrupciones debido a las cerca de 50 faltas pitadas y a los incidentes de los últimos minutos con la afición local que obligaron al árbitro a pitar el final antes de tiempo.
El juego se detuvo en el minuto 86 después del lanzamiento de petardos y bengalas por parte de algunos aficionados del Santos y el intento de estos de invadir el césped, lo que obligó a intervenir a las fuerzas de seguridad.
Cabe destacar que Bascuñán venía de dirigir el polémico Superclásico en el que también hubo serios incidentes, pero no determinó la suspensión del cotejo en el estadio Monumental.