Gran nivel del chileno en Burnley.
EFE
SANTIAGO.- Las últimas dos semanas no fueron nada fáciles para el
Manchester United. Sumaba dos derrotas consecutivas en la
Premier League y el bajo rendimiento del equipo generó una lluvia de críticas por parte de hinchas y medios.
Por eso el triunfo de este domingo ante el Burnley es tan fundamental. El 2-0 conseguido como visitante es un verdadero tanque de oxígeno para el técnico José Mourinho, quien se encontraba al borde de la cornisa en su puesto.
Y uno de los grandes responsables de este logro es el chileno
Alexis Sánchez. El tocopillano volvió a ser titular luego de dos fechas -producto de una lesión- y cumplió un rol clave en al triunfo del cuadro mancuniano.
Pese a que el seleccionado nacional arrancó un poco aislado en la banda izquierda, poco a poco se fue posicionando más hacia el centro, lo que lo ayudó recibir mucho más el balón. De ahí en adelante se transformó en el principal conductor de los "Diablos Rojos" y se lució con una notable asistencia en la apertura de la cuenta.
Al minuto 26, el chileno le dio un preciso centro a Romelu Lukaku, quien de cabeza marcó el 1-0 sobre el Burnley. El propio belga convirtió el segundo tanto a los 44', aprovechando un rebote en el área rival.
Y aunque el chileno era uno de los más activos y movedizos del United, Mourinho decidió reemplazarlo al minuto 60, al parecer para cuidarlo luego de la lesión que sufrió hace un par de semanas.
Marcus Rashford, quien entró en sustitución del chileno, recibió una falta penal que Paul Pogba desperdició a los 69', y sólo dos minutos después el delantero fue expulsado por un encontrón con un defensor del Burnley.
Debido a esto, el United se dedicó a defender el resultado durante el resto del compromiso, con lo que dejó atrás todas las polémicas vividas en las complicadas últimas semanas.
