SANTIAGO.- El día 10 de febrero de 2017, Wolfgang Burmann, uno de los máximos exponentes del ciclismo chileno, estaba en la casa de un amigo en Argentina, donde se preparaba para competir en la Vuelta a Mendoza. Ese día, en el que cumplía 26 años, se levantó incómodo. Sentía una sensación extraña.
Mientras revisaba los saludos por su cumpleaños en el celular, se percató que le llegó un mail. Estaba en francés, idioma que no maneja, pero entendió de inmediato a qué se refería: la
Unión Ciclista Internacional (UCI) le informaba que había dado
positivo por anfetamina, efedrina y modafinil en un control antidopaje realizado el 18 de septiembre de 2016. Desde esa fecha en adelante, debía cumplir una suspensión de dos años sin poder pedalear profesionalmente.
"Cuando leí el mail no fue un momento triste ni terrible, era una sensación que no sabía cómo reaccionar. Estaba como en shock. Sentía que debía sentir pena, pero la pena todavía no existía. Recién empezó a existir cuando comencé a necesitar el ciclismo y no lo tenía", señala a Emol el deportista, hoy con 27 años, a solo días de haber cumplido el castigo de dos años que frenó su ascendente carrera.
- Antes de que dieras positivo eras catalogado como la promesa del ciclismo nacional. Habías ganado la Vuelta a León en España e incluso allá la prensa te llamó la "perla chilena"… ¿Sientes que tu promisoria carrera se cortó con la sanción?
"Claro que me puede haber costado la carrera, pero habrá que verlo en el tiempo... Es complicado porque se te acaban los sueños, pero si vuelvo pueden nacer otros".
- ¿Pensaste en retirarte cuando se te comunicó lo del doping?
"Se me pasó por la cabeza retirarme de forma competitiva. Volver es algo que quiero que se vaya dando en el camino. Y si a lo mejor no regreso a correr, quiero ser feliz siendo ciclista amateur y disfrutar del viento en la cara".
- Antes del castigo estabas dedicado 100% al ciclismo y con la sanción se frenó en seco tu carrera… ¿Qué hiciste durante este tiempo sin competir?
"Yo ya tenía decidido de todas formas retomar mis estudios. Yo estudiaba nutrición, pero había congelado años atrás. Debido al tiempo que había pasado, no pude retomar la carrera desde el año en que iba, por lo que tuve que empezar de cero. Por esto ingresé de nuevo a estudiar kinesiología en la UNAB.
Paralelo a eso, seguí con mi trabajo. Tengo una pequeña escuela donde entreno a diferentes personas. Además, trabajo en algunos gimnasios como profesor. Con esto me podía también costear el día a día. Estoy disfrutando de estudiar. La verdad es que estoy feliz de haberme cambiado de carrera, la cual me fascina".
- ¿Qué se viene ahora que estás habilitado para regresar?, ¿volverás a competir profesionalmente?
"Quiero tomarme el tiempo para no tomar una decisión apresurada. Estoy seguro que volveré a correr en algún momento, pero me gusta hacer las cosas bien. No quiero correr por correr. Quiero esperar el momento en el que me sienta nuevamente en el nivel que estaba para poder volver a competir".
- Entonces, ¿volverás a entrenarte con todo?
"Sí, por supuesto. Voy a partir con volver a entrenar con algún objetivo. Ordenado y tranquilo. Y ahí ir viendo cómo se dan las cosas y cuándo es el momento oportuno de volver.
Mi cuerpo no ha cambiado, en todo este tiempo subí como tres kilos, lo mismo que cuando terminaba una temporada y me iba de vacaciones. Es algo insignificante si quiero alcanzar el alto rendimiento otra vez".
- ¿Te han hablado de algún equipo para correr?
"Volver depende únicamente de mis ganas... No creo que tenga problemas en encontrar equipo, quizás para la Vuelta a Chile, pero todo depende de cómo me sienta y de los tiempos".
- El retomar la competición te hará volver a congelar tus estudios seguramente...
"No, no existe esa posibilidad. Hoy tengo las cosas súper claras. El día tiene 24 horas. Si vuelvo, no dejaré lo que estoy haciendo ahora. Lo que no quiere decir que vaya a hacer lo otro mejor ni peor. Quiere decir que tendré que esforzarme más para poder hacerlo igual o mejor de lo que lo hacía antes".
- En el caso de que vuelvas a insertarte de lleno en la elite, ¿ves posible retomar el nivel donde decían que eras una promesa?
"Lo veo posible de acuerdo a las ganas que vaya teniendo en el camino. Me creo capaz de hacerlo, lo que no quiere decir que vaya a ocurrir. Depende de mí y de muchas otras cosas. Pero yo doy el primer paso.
Ahora no quiero tomar una decisión que después haga sentirme mal. Amo tanto el ciclismo, que tomar una decisión apresurada me puede llevar a detestarlo más que reencantarme. Y eso es lo que no quiero, yo quiero volver a amarlo tanto o más como siempre lo amé".
- Te pongo en el caso contrario, de que no consigas un nivel adecuado… ¿No tendrías problemas con no volver a ser profesional?
"No, no tendría problemas. Para ser profesional tengo que tener un nivel. Así que iré viendo cómo me comporto".