Volverán a encontrarse tras el quiebre definitivo entre ambos.
Agencias
SANTIAGO.- "He decidido apartar a Fabián Orellana. La decisión está basada en una falta de respeto inaceptable. A partir de ahora el club defenderá sus intereses. Conmigo no pertenece más a este equipo".
Con esas duras palabras,
Eduardo Berizzo le cerró las puertas de forma tajante del Celta de Vigo al delantero chileno en enero del 2017. Acusaba una rebeldía del atacante, lo que no podía ser tolerado. Fue así como entrenador y jugador cortaron relaciones para siempre, en un conflicto que hasta el día de hoy no ha sido resuelto.
Este enfrentamiento, que se habría producido en plena práctica luego de que Orellana expresara su molestia por el escaso tiempo de vacaciones que Berizzo le dio al plantel en ese entonces, fue recordado por los medios españoles en la antesala del cruce que tendrán ambos este fin de semana.
El Eibar de Orellana recibirá al Athletic de Bilbao del adiestrador argentino este domingo, por lo que ambos volverán a verse las caras a poco más de un año y medio del problema que tuvieron y que terminó con la drástica salida del chileno del equipo de Vigo.
"Orellana era uno de los estandartes de aquel Celta, pero Berizzo no se casa con nadie y para el argentino hay cosas que son innegociables dentro del vestuario. El respeto es una de ellas. La Directiva celeste secundó la decisión del entrenador y a Orellana no le quedó otra que hacer las maletas", señala el diario Marca.
Tras ser separado del equipo, el delantero partió al Valencia, donde no alcanzó a estar un año y cambió de rumbo para recaer en el Eibar. Ahora Orellana tiene una nueva oportunidad de "reivindicarse ante el técnico que le enseñó la puerta de salida en Vigo", añade el citado medio.
Lo cierto es que el ex seleccionado no se fue para nada contento del club, e incluso posteriormente, en conversación con El Mercurio, acusó de "desleal" a Berizzo.
