SANTIAGO.- Después del partido entre Suecia y Turquía en la Liga de las Naciones, en el que los suecos ganaron por 1-0, se encendió la polémica por una declaración del delantero nórdico Marcus Berg.
El atacante señaló que durante el entretiempo habló con el árbitro, el rumano István Kovács, para "pedir explicaciones sobre una acción que el consideró penal, a lo que el juez le prometió que si comprobaba su error, le resarciría con dos penas máximas en el segundo tiempo", sostiene el Diario Marca.
"En el descanso fui a hablar con el árbitro para protestarle un penal que me hicieron y que no señaló. Nos sentamos en el vestuario, le hice ver mi punto de vista y me hizo una promesa: 'Voy a ver las imágenes y si compruebo que he fallado en la acción que reclamas, te concederé dos penales en la segunda parte'", dijo Berg al diario Aftonbladet.
La polémica se encendió aún más porque justo el encuentro se definió mediante un penal en el segundo tiempo que se lo hicieron al propio Berg.
A raíz de esto, según el citado medio, "la federación de Turquía se está planteando impugnar el partido tras conocerse las declaraciones de Berg".