SANTIAGO.- Bochorno, escándalo, papelón. Sobran adjetivos para calificar todo lo que ocurrió ayer en Argentina y que obligó a la
suspensión de la súper final de la Copa Libertadores 2018.Tras el caos, y que luego de más de dos horas se tomara la decisión de aplazar el compromiso,
se programó para este domingo a las 17:00 horas. Pero...Y es que los jugadores de
Boca Juniors no quieren presentarse en el estadio Monumental de River Plate. Según el periódico La Nación, el plantel se cuestiona "¿quién nos da garantías de que salgamos con vida?".De hecho, los xeneizes buscarían que la Conmebol los proclame campeones sin jugar.
Se pensó como solución jugar sin público. River lo rechazó de inmediato. ¿Entonces?
A esto se suma que ayer la Agencia Gubernamental de Control del Gobierno de Buenos Aires anunció que el estadio Monumental de Núñez, donde se debería llevar a cabo el partido, será clausurado.
Habrá que esperar el transcurso de las horas y ver qué decidirá la Conmebol... El show continuará...