SANTIAGO.- El escándalo no se detiene. Apenas unos minutos después del fallo emitido por Conmebol que dictaminó que la final River-Boca se juegue el 8 o 9 de diciembre y fuera de Argentina, vino la respuesta inmediata de Boca Juniors.
El presidente del conjunto xeneize, Daniel Angelici, fue enfático al señalar que el elenco de La Bombonera no jugará el encuentro.
"No aceptamos jugar ningún partido y si tenemos que ir al TAS lo vamos a hacer", precisó.
En esa misma línea, mostró confianza a la determinación final que pueda tomar el Tribunal de Disciplina de Conmebol, que recordemos acogió un petitorio de Boca en el que exigen descalificar a River y proclamarlo automáticamente como monarca de la Libertadores.
"No tengo por qué no confiar en el Tribunal. Que apelen al derecho, dentro de la historia de Conmebol hay antecedentes similares, como el que sufrimos con nuestra descalificación en 2015. Hay antecedentes para lo que está pidiendo Boca. No hubiera firmado el documento si no tuviera los argumentos suficientes. Está dentro de la reglamentación. Conocemos nuestros derechos.", aseveró el directivo.
Sobre las razones para tener esta postura, Angelici agregó que "no tenemos la cabeza para jugar otra final. No estoy conforme con que hayan puesto una fecha. Yo tengo la obligación de defender los intereses de mis socios. Boca va a agotar todas las instancias administrativas que tenga".