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Los dos clubes que habrían jugado un papel clave en el desenlace de las elecciones de la ANFP

Cuando parecía que a Sebastián Moreno se le escapaba la presidencia del fútbol chileno a manos de Jorge Uauy, cambios de último momento le terminaron dando el triunfo.

29 de Noviembre de 2018 | 17:07 | Por Martín Gutiérrez Ahumada, Emol
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El nuevo mandamás de la ANFP.

Agencia Uno
SANTIAGO.- Reñidas hasta el último minuto fueron las elecciones de la ANFP que se llevaron a cabo en Quilín y que terminaron con el estrecho triunfo del candidato de oficialismo, Sebastián Moreno.

La victoria de la carta de la continuidad se dio luego de que sumara la mayoría absoluta que exige el artículo 24 del estatuto de la ANFP: 25 votos contra los 21 que recolectó Jorge Uauy, el candidato de la "oposición".

Fue una votación infartante e histórica la que se vivió en Peñalolén. Nunca se había disputado una cuarta vuelta en la historia del balompié nacional y esta elección se recordará por dos clubes que se dieron vuelta conforme iban avanzando las rondas.

Según datos recopilados por Emol y sin que aún la ANFP lo haya oficializado, Unión Española y Cobreloa habrían ido cambiando su postura desde el inicio hasta el final del proceso. Los hispanos arrancaron apoyando a Moreno, mientras que los loínos le dieron su respaldo inicial a Harold Mayne-Nicholls. Pero todo se modificaría sobre la marcha.

Cuando se creía que Moreno sería el vencedor en la segunda vuelta -debido a que los votos de Harold se veían más cercanos a su candidatura-, sorprendentemente Uauy arremetió y sumó 24 sufragios contra 22 del abogado. ¿Qué pasó? Unión, que habría votado por el oficialismo en la primera ronda, luego se habría decantado por el timonel de Palestino.

Una presunta voltereta que hizo pensar lo peor para la lista del actual secretario del organismo. "Hubo un momento en que se pensó que se ponía muy difícil", contó un cercano al otrora presidente de Cobresal.

Sin embargo, la victoria no se dio a favor de Uauy ni en segunda ni en tercera vuelta, porque para que hubiese un ganador se necesitaba la mayoría absoluta (25 sufragios).

El suspenso y nerviosismo era total en Peñalolén. El proceso se estiraba hasta una cuarta instancia y contra todo pronóstico, Moreno daba vuelta su desalentador escenario.

Clave para que el abogado modificara el contrario escenario fueron los cambios que habrían tenido Unión y Cobreloa.

Después de ratificar su voto a Uauy en tercera vuelta, en la cuarta, y a la larga última instancia, el cuadro de Independencia habría decantado por el oficialismo y le habría dado su sufragio a la lista de la continuidad.

Lo mismo habría ocurrido con el conjunto loíno, que tras empezar apoyando a Mayne-Nicholls y luego a Uauy, en definitiva terminaría entregando su respaldo a Moreno.

Pese a que desde el bloque de Uauy se le habría hecho un posible ofrecimiento en el directorio, finalmente Cobreloa se habría inclinado por el abogado y le habría terminado dando la victoria.

Lo cierto es que en definitiva el triunfo fue para la lista del oficialismo, que destacó la "gobernabilidad y tranquilidad" en la que se desarrolló el proceso en Quilín.
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