SANTIAGO.- Fue la bomba de ayer lunes en Colo Colo: en una concurrida conferencia de prensa,
el delantero paraguayo Lucas Barrios oficializó su salida de Colo Colo.
El atacante dio los motivos de su salida y no quiso revelar las razones, sólo limitándose a decir que "por códigos" no iba a hablar de los motivos de su abrupta y sorpresiva partida de Macul.
De todas formas, Barrios dio luces de problemas en el club al asegurar que estaba "dividido" y que "sería diferente si tiraran todos para el mismo lado".
Según El Mercurio, Barrios reveló a su círculo íntimo que "fui usado como un instrumento entre Aníbal Mosa y Gabriel Ruiz Tagle...pero nadie pensó en qué condiciones estaba cuando me contrataron. Había apuro por lucirme y ni siquiera tuve una pretemporada como corresponde".
En la misma publicación del mencionado medio, algunos hechos ocurridos en la última semana habrían colmado su paciencia. El primero tiene que ver con que Blanco y Negro haya comunicado la partida de Héctor Tapia cuando todavía no terminaba el torneo, a pocos días de enfrentar a U. de Concepción.
El segundo tiene que ver con que los directivos en la misma víspera del encuentro les hayan comunicado a César Pinares y Gonzalo Fierro que no entraban en los planes para el 2019.
Pero la gota que rebalsó el vaso para el guaraní fue que los regentes le propusieran a Agustín Orión y Julio Barroso que redujeran sus pretensiones de sueldo si deseaban extender su estadía en Pedrero.
Ahí Barrios se cansó y terminó tomando la decisión de abandonar el Cacique luego de haber jugado un semestre, en el que tuvo un opaco rendimiento marcando sólo cuatro goles.
