El rostro de Collins lo dice todo: recibir nueve goles no es para nada gratificante.
Reuters
SANTIAGO.- Pitazo final y el Etihad Stadium es una fiesta. El Manchester City acaba de conseguir un histórico triunfo por 9-0 sobre el Burton Albion por las semis ida de la Copa de la Liga.
En el cuadro de la tercera división el jugador más afectado con el apabullante resultado es, por lejos,
el portero Bradley Collins, víctima de todas las conquistas "Citizens".
Fue él quien en nueve ocasiones tuvo que ir a recoger la pelota a su arco y el que más burlas y humillaciones recibió desde las gradas.
Al percatarse de la triste escena protagonizda por Collins tras el partido, Guardiola frenó los festejos y se dirigió rápido hacia donde se encontraba el meta, con el que tuvo un noble gesto que ha sido destacado por los medios de Europa.
El DT del City abrazó al golero y le entregó una serie de palabras de aliento para que superara el mal trago de la goleada recibida. Luego el español elogió el trabajo hecho por el Burton Albion por haber llegado a semis de la copa, pese a su inferioridad económica.
"Quiero felicitar al Burton Albion por llegar a esta fase de la competición. Merecen mucho reconocimiento. Nigel Clough (el técnico) es increíble. ¡Su padre le enseñó algunos trucos! Ustedes saben mejor que yo lo que él representa. Respeta el fútbol y es carismático. Es un honor jugar contra su equipo", señaló Guardiola en conferencia de prensa.
Las palabras y el consuelo entregado por Guardiola al equipo rival ha sido alabado por la prensa de Inglaterra, la que ha calificado su acción como "honorable" y "generosa".