SALZBURGO.- Antes del inicio de la serie parecía muy difícil que su nombre figurara entre los protagonistas de la gesta ante Austria. Sin embargo, la sorpresiva decisión de Nicolás Massú cambió radicalmente su historia en la llave.
Se trata de Marcelo Tomás Barrios, el hombre que terminó siendo una de las inesperadas figuras del elenco nacional en Salzburgo gracias a la determinación del doble medallista olímpico.
Su elección fue una gran apuesta considerando que el jugador de 21 años estaba debutando en un partido por los puntos en este certamen y que al frente, en la pareja local, estaban Oliver Marach, número 8 del mundo, y Jurgen Melzer, ex top 10 en la especialidad.
Si bien Barrios junto a Hans Podlipnik cayeron, lo hecho por la dupla criolla superó completamente las expectativas. Llegaron hasta el tercer set y, aunque lo perdieron 7-5, estuvieron cerca de dar el batacazo.
Y para sorpresa de casi todos, Barrios, 325 del ranking ATP y desconocido por muchos, se echó el equipo al hombro de una manera excepcional y fue el estandarte de la dupla nacional.
De hecho, jamás se vio nervioso ante los incesantes gritos del público local y se paró dentro de la arcilla austriaca con una actitud propia de un tenista que lleva varios años jugando Copa Davis.
Más allá de su notable actitud, su tenis fue sobresaliente. Jamás le quebraron el servicio, voleó muy bien y con la devolución ganó varios puntos con tiros potentes.
Tras este duelo, los únicos que no parecían sorprendidos eran los integrantes del equipo nacional. Tenían la confianza de que iba a rendir y no fallaron.
Incluso, en conferencia de prensa, el propio Barrios acotó que "con Hans (Podlipnik) había jugado antes y eso me ayudo bastante. Me sentí muy cómodo y lo pasé muy bien jugando. Obvio que duele perder, pero al final el balance del partido es más positivo que negativo".
También, "H-Pod" comentó: "Como todos vieron, Tomás jugó un gran partido y estuvimos a nada de ganar. Fue una decisión inteligente el haber competido los dos juntos".
De esta forma, Barrios, quien está asentándose en el circuito de Challenger, emerge como un jugador que podrá seguir siendo opción para Massú en el futuro y que sabe que podrá utilizarlo en cualquier circunstancia.
Y lo más importante es que para las finales de la Davis, que se disputarán en noviembre en Madrid,
el chillanejo será un apoyo importante para Nicolás Jarry y Christian Garin.
Ahora solo hay que esperar para ver cómo progresa Barrios esta temporada y si es que llega a noviembre accediendo a algunas instancias finales en Challengers, ya que hasta el minuto esa ha sido su deuda en ese circuito.