Jarry ya piensa en el choque ante Zverev.
EFE
Un triunfo con sabor a revancha fue el que obtuvo este lunes Nicolás Jarry (81° del mundo) en el ATP 500 de Barcelona. El chileno derrotó en un sufrido partido por 7-5, 4-6 y 6-4 al español Marcel Granollers (110°), el rival que lo había derrotado el domingo en la última ronda de la qualy.
Tras su luchada victoria, el criollo, quien ingresó al cuadro principal como "lucky loser" (perdedor afortunado), reconoció que "significa mucho para seguir ahí, sé que el nivel lo tengo. Le he ganado a dos top 50, son las únicas victorias que tengo, pero son dos victorias realmente buenas".
"He tenido partidos que se me escapan pero tengo que seguir mejorando, lo más difícil es seguir luchando cuando las cosas se te escapan y eso es lo que estoy haciendo y espero seguir por el buen camino, no escaparme y tratar de confiar más en el proceso", añadió.
Sobre el duro duelo que tendrá este martes frente al alemán Alexander Zverev, número 3 del mundo, el jugador nacional sostuvo que "será muy difícil. Va a ser el mejor jugador que me ha tocado enfrentar hasta ahora y una muy linda prueba".
"Yo creo que cada partido que he estado jugando acá estoy jugando mejor. Estoy feliz de haber ganado la pelea hoy día. Se me dio una buena opción para dar vuelta la página de ayer y enfrentarme nuevamente (a Granollers), después de un complicado partido y complicado final, pero feliz y hay que seguir luchando", completó el chileno.
