El calor que habrá durante los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 tiene preocupado a la organización de la cita deportiva. Para julio y agosto del próximo año se esperan temperaturas entre 35 y 40 grados, y una humedad del 80%.
Se han probado distintas medidas paliativas. Estaciones de nebulización, pavimento que reflecta los rayos ultravioleta o carpas de enfriamiento con aire acondicionado. Lo último ha sido nieve artificial.
El método se probó en una competencia de piragüismo en el Sea Forest Waterway. Esta sede, donde se disputarán las competencias de remo,sufrió un recorte en su presupuesto de construcción y solo la mitad de sus dos mil asientes están bajo techo. Hay temor de que algún espectador pueda sufrir un golpe de calor debido a las altas temperaturas
Un camión se instaló junto a las gradas y la nieve comenzó a caer. Los espectadores reaccionaron con una sonrisa al ver caer esos copos artificiales sobre ellos.
"No está decidido que utilizaremos este sistema el próximo año para los Juegos, pero queríamos probarlo y ver su eficacia. Estamos dispuestos a probar cualquier idea potencialmente útil", le comentó un portavoz de la organización a la agencia AFP.
La nieve artificial ya ha sido utilizada en festivales de música y danza. Sin embargo, ha sido criticada por utilizar sistemas que generan gas.
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